No podía ayer dar dos pasos en la Feria el candidato popular a la Alcaldía de Córdoba, José María Bellido, sin que alguien frenara su camino y el de la amplia comitiva que lo acompañaba para felicitarlo. Así llegó, a trancas y barrancas, a la caseta La Prensa, a la tradicional recepción de los lunes que organiza la Asociación de la Prensa de Córdoba. Allí acudió también la alcaldesa en funciones y candidata socialista, Isabel Ambrosio, que lleva con gran naturalidad la cada vez más cierta posibilidad de un pacto que le arrebate el cargo. Buena educación por ambas partes: Bellido fue cordial y también lo fue Ambrosio, demostrando ambos una cortesía y saber estar que se valora enormemente en estos tiempos de agresividad política y prepotencia.