Mientras trabajo, tengo de fondo, en Facebook, el estreno de un nuevo formato de comunicación puesto en marcha por el PP de Córdoba. Desde la página Populares de Córdoba se inicia el ciclo de Foros desde la primera línea. En la pantalla, el presidente provincial, Adolfo Molina, que presenta el acto, la diputada andaluza y portavoz de Sanidad, Beatriz Jurado, que canaliza las preguntas del público virtual, y, como primer invitado del ciclo, el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre.

La idea responde a los nuevos estilos que se han implantado desde que se decretó el estado de alarma. No es que no se utilizase antes la videoconferencia, pero durante estos dos meses y medio se ha convertido en un instrumento imprescindible de comunicación, entretenimiento, debate y, por qué no decirlo, propaganda. Ahora empiezan las conferencias de prensa en vivo, como las del alcalde, José María Bellido, o la portavoz socialista, Isabel Ambrosio, pero hasta hace unos días eran todas virtuales. Como decía Jesús Aguirre en su conversación, de esta pandemia habrá muchos protocolos médicos que «han venido para quedarse», como la telemedicina.

Pero lo interesante es ver al consejero charlando «en casa», con los suyos del PP, recibiendo preguntas de militantes y dando mucha información (como hace a diario) pero permitiéndose recordar que es un ser humano, que lleva 17 meses y «tampoco me dijeron que iba a ser tan difícil», que ha pasado muchas noches sin dormir, que la famosa listeria que se encontró nada más llegar y la forma en la que se resolvió esa crisis permitió que el Servicio Andaluz de Salud se preparara para estas situaciones de infección que luego ha multiplicado el coronavirus.

Por supuesto, el consejero se cuelga las medallas que considera, y se las cuelga también a los profesionales sanitarios, y tiene a su favor el dato innegable de que la pandemia no ha hecho en Andalucía los estragos que en otros territorios. Muchas preguntas, respuestas distendidas y una advertencia de Aguirre: «No echemos las campanas al vuelo». Por descontado.