La exministra venezolana de Asuntos Exteriores presidirá la Asamblea Constituyente con la que el régimen chavista pretende transformar el Estado y el orden jurídico del país. En la singular y restrictiva interpretación que tiene el chavismo de entender la democracia, nada más llegar al cargo ha avisado a la oposición: «Si no toma el camino democrático, se impondrá la justicia».