Cierto que el Gobierno de Pedro Sánchez va a ser muy corto, no llegará a un año, pero han pasado los meses entreteniéndonos con los temas catalanes y otros asuntos que tendrán relevancia política pero no inciden en la vida de los ciudadanos. Ahora, en los «viernes sociales» van a aprobar múltiples decretos, como el de la vivienda del pasado Consejo de Ministros. Para mí que llegan tarde, especialmente si se proponen cambiar la reforma laboral. ¿Tres días antes de las elecciones? No me ofrece garantía. Parecen meros gestos de campaña.