En los días de campaña en los que todo el mundo ha establecido sus «cordones sanitarios» a la hora de votar o pactar, los creyentes en Jesús de Nazaret también tenemos nuestras condiciones, que el Evangelio, la Doctrina Social de la Iglesia y los mensajes del Papa Francisco establecen.

Porque hay incluso partidos que mantienen una propuesta racista, xenófoba, homófoba, aporófoba, ultranacionalista, nazifascista y partidaria de la tenencia de armas. Que además se jactan con cierta razón de tener el «voto católico». Son gente interesada en arrimar el ascua de «lo cristiano» a su sardina. Votar en cristiano no es necesariamente votar a los que más nombran a Dios, al aborto o a la educación religiosa, es votar a los que más realizan en su vida y gestión «la voluntad de Dios»: No os hagáis ilusiones con razones falsas repitiendo «El templo del Señor, el templo del Señor,...Si no explotáis al emigrante, al huérfano y a la viuda, si no derramáis sangre inocente en ese lugar..., entonces habitaré con vosotros en este lugar» (Jer 7,2.4.6).»¿Qué me importa el número de vuestros sacrificios? -dice el Señor-... buscad el derecho, enderezad al oprimido, defended al huérfano, proteged a la viuda» (Is 1,11.17).

El Papa Francisco defiende una iglesia pobre y de puertas abiertas, que profesa la misericordia, el cuidado de la casa común, la libertad, la opción por los pobres y descartados y la alegría del evangelio. Y la acogida: «Fui extranjero, y me acogisteis» (Mateo 25,35) frente a quienes quieren criminalizar a las personas por ser de otro país y empobrecidos.

El Evangelio hace una clara opción por los pobres y excluidos. Jesús propuso una nueva sociedad de iguales, sin ningún tipo de discriminación. Llamó a compartir los bienes que Dios ha creado para todos. Denunció las injusticias y la corrupción. Desenmascaró el sistema político de su tiempo. Su misión fue anunciar el reino de Dios, aliviando el sufrimiento humano. Para empujar la Historia en favor de la exclusión y la debilidad, las seguidoras y seguidores de Jesús tenemos que Votar en su defensa.