Iniciativa Córdoba 20-30 es un laboratorio de ideas del que forman parte personas de diversas sensibilidades y oficios que, creyendo ciegamente en el potencial de futuro de nuestra ciudad, tratan de sacudirla de la pereza y el ensimismamiento en que está instalada desde hace décadas a base de ideas perfectamente realizables a corto, medio y largo plazo. El resultado de ese trabajo constante de ciudad se puede ver en https://iniciativacordoba2030.blogspot.com

Una de las iniciativas en su día aprobadas por el laboratorio fue la de Córdoba Verde. Esta idea integral de carácter medioambiental se marca dos objetivos generales: por un lado, la creación de espacios verdes sostenibles y autóctonos alrededor y dentro de la ciudad, más el replanteamiento de los ya existentes, tomando como ejes principales el río y la sierra; por otro, la gestación de un proyecto educativo intergeneracional que arraigue la cultura del compromiso social con el sostenimiento bioclimático de la ciudad hasta hacerla referente nacional e internacional en la materia.

Se trata de un proyecto que implica tanto a las instituciones públicas y privadas -Ayuntamiento, Junta de Andalucía, universidades, sindicatos, empresarios, asociaciones profesionales, etc.- como a la propia sociedad civil, sin cuyo compromiso la iniciativa será papel mojado.

Descendiendo a lo concreto, la idea busca un diseño de ciudad rodeada de bosques y espacios verdes amoldados al crecimiento natural de la misma -por ejemplo, los parques de lo que el PGOU 2001 denomina Anillo Periurbano: Parque de Turruñuelos y Canteras del Albaida, Paseos de Poniente, la Alameda del Obispo, el Parque del Cordel de Écija, el Parque del Arenal, el Parque de Levante, la Ciudad Deportiva de Levante, los Paseos del Canal del Guadalmellato-, la remodelación de algunos de los espacios verdes existentes para hacerlos bioclimáticamente más eficaces -tal es el caso, por ejemplo, de los Parques de la Asomadilla y del Patriarca-, y el aprovechamiento de cualquier espacio de ciudad, por mínimo que sea, para una estudiada recreación arbustiva, actuaciones materiales mucho menos costosas de lo que podría pensarse -preguntémonos qué vale una semilla de árbol- y que han de ir acompañadas de un plan permanente y sostenido de concienciación medioambiental y bioclimática en las escuelas, en los institutos y en los centros universitarios que esté promovido esencialmente por las instituciones, en particular por el Ayuntamiento a través de su Escuela Verde -un centro de formación medioambiental global y especializado llamado a convertirse en referente-.

De esta manera, Córdoba será más verde y sostenible y, por tanto, más habitable para sus vecinos, que indiscutiblemente ganan en calidad de vida, ofreciendo añadidamente un reclamo más al mundo de su infinito encanto.