¿Quién teme la lluvia? El Carnaval cordobés no, aunque para eso las comparsas, cuartetos y chirigotas que acompañaron al desfile carnavalesco de ayer en Córdoba dejasen en casa los instrumentos, para evitar que se mojasen, y cantasen sus coplas a capela. Así acompañaron al cortejo hasta la plaza de la Corredera, donde sonaron muchas de las letras que días antes se escucharon en el Gran Teatro, aunque como queda dicho, esta vez generando los sonidos, el ritmo y la melodía solo con la voz, sin necesidad de ningún tipo de instrumento musical. El dios Momo ardió orgulloso, y tampoco aquí la lluvia tuvo nada que decir. Adiós don Carnal, de viva voz...