Para divulgar la Ciencia y la Técnica es necesario un ingente esfuerzo de clarificación primero de los divulgadores para trasmitir los avances científicos y técnicos en el marco lingüístico adecuado con honestidad y trasparencia a la sociedad. Ello requiere un mensaje claro, sin usar palabras inadecuadas o confusas. Los componentes del binomio abordado aquí son diferentes por mucho que se empeñen algunos, aunque tienen connotaciones comunes. A continuación, se exponen los conceptos de innovación e investigación, así como sus relaciones mutuas.

La «innovación» significa creación de novedades (ej. paradigmas, herramientas, procesos, productos, servicios, etc.), cambios de lo establecido o diferenciación de lo ya creado. La novedad puede tener diferentes grados. Existen más de 50 definiciones de innovación que complican mucho su empleo adecuado pues provocan confusiones. Recientemente, hemos propuesto el Dr. JJ Giner y el que suscribe el artículo, una propuesta que agrupa los múltiples conceptos dispersos en tres:

1) Innovación pura o de background, que implica novedad, cambio, o diferenciación; de esta concepción se derivan los otros grupos;

2) Innovación básica, es la más cercana a la «pura» y está relacionada con los verbos crear, generar o inventar referidos algo nuevo, tangible o intangible. Sus fundamentos son características personales como creatividad, imaginación, intuición, curiosidad etc., además de riesgo de fracaso y una atmosfera propicia. Tiene unas connotaciones más individuales que colectivas y sus iconos son, entre otros, Leonardo da Vinci y Albert Einstein pero actualmente la innovación básica se logra en grupos a los que se puede aplicar las mismas connotaciones atribuidas aquí a un individuo. Muchos caricaturizan a la innovación básica al «sabio despistado» al que se le ha encendido la bombilla, como una iluminación divina. Pero no puede haber innovación básica si no se está trabajando intensamente.

3) La innovación aplicada, surgida también de la innovación pura, es la más usada como «innovación» actualmente, y describe novedades introducidas en el mercado para su consumo y que mejora en calidad a lo existente y genere beneficios; puede partir de cero o de una invención previa (innovación básica). Ocurre cuando se produce la trasferencia de resultados de la innovación aplicada por una tercera parte al mercado. En general es de tipo colectivo realizada por una corporación o empresa. Es a lo que tradicionalmente se ha denominado incorrectamente innovación en exclusiva como en la secuencia investigación+desarrollo+innovación (I+D+i).

La «investigación» según fuentes bibliográficas de prestigio implica ampliar el conocimiento científico-técnico (investigación básica) o con miras a desarrollar una herramienta, proceso, o producto que podrá ser usado para la mejora de los existentes o la resolución de problemas (investigación aplicada). Esta investigación práctica puede surgir como continuación de los logros de la investigación básica por el mismo equipo o no. La investigación aplicada valida los logros de la básica. En contra de lo que dicen muchos textos, no se puede atribuir la calidad a la investigación básica y dejar en segundo plano la aplicada. Esta deformación es debida a que la primera genera artículos científicos cuantificables con índices de calidad (ej. artículos por año, factor de impacto, índice de Hirsh, etc.) mientras que la aplicada se materializa mas en objetos/sistemas trasferibles al mercado. La Agencias de Evaluación deberían ser conscientes de este hecho.

Las relaciones entre innovación e investigación suelen ser conflictivas ya que con frecuencia tienden a confundirse en la literatura. Son dos conceptos complementarios y mutualmente enriquecedores, pero diferentes: uno se refiere a la novedad y el otro al conocimiento, respectivamente. Las diferenciaciones pueden basarse en diversos criterios:

A) La relación mutua y así se distingue la innovación en la investigación (en el ámbito de la innovación básica) y la investigación sobre la innovación (en el ámbito de la innovación aplicada).

B) La temporalidad, es decir, cuál de las dos aparece en primer o segundo lugar. En la primera opción, la innovación tiene lugar antes o está asociada a la investigación en el ámbito de las innovaciones e investigaciones básicas. Por otra parte, la investigación puede tener lugar antes de la innovación; en este caso corresponde a la innovación aplicada. Esta acepción está muy extendida y soportada por organizaciones prestigiosas (ej. OECD, UE) e incluso en el título del actual Ministerio Español de Ciencia, Innovación y Universidades. En este da la impresión de que la Ciencia no tiene relación con la innovación, lo que es una aberración. Se trata de las dos concepciones básica y aplicada de innovación que son usadas en diferentes contextos.

Es importante resaltar también que no hay equivalencia entre investigación aplicada e innovación aplicada. La primera genera resultados, que si no son trasferidos al mercado (ej. se registra una patente, que no es comprada por tercera parte) no se les puede aplicar la denominación de innovación aplicada. Innovación aplicada es trasferencia, por lo que se propone que la secuencia I+D+i sea sustituida por I+D+T para evitar ambigüedades.

En definitiva, se propone armonizar los conceptos de innovación para facilitar la comunicación entre jóvenes, divulgadores, científicos, responsables políticos y periodistas y evitar la ambigüedad del término innovación.

* Profesor jubilado de la UCO