No levanta cabeza con sus adicciones. El actor estadounidense, que el pasado 15 de agosto cumplió 46 años, ha ingresado en un centro de rehabilitación de Los Ángeles después de que su todavía esposa, la actriz Jennifer Garner, acudiera a su casa y le convenciera de que recibiera de nuevo ayuda profesional. Es la tercera vez que Afleck pasa por un centro de este tipo.