El baipás, ese proyecto al que llevan dándole vueltas desde hace varios años y que este verano el señor Rajoy prometía como una inversión interesantísima para Andalucía, que el Gobierno pretende ejecutar a partir del próximo año. Consistiría en construir unos dos kilómetros de vía de la red de Alta Velocidad que unirían la línea de AVE que va de Sevilla a Madrid con la que va de Córdoba a Málaga. De esta manera, las comunicaciones ferroviarias entre Sevilla y Málaga ya no tendrían que pasar por Córdoba y quienes hicieran este trayecto se ahorrarían unos 15 o 20 minutos de su precioso tiempo. Con lo bien que lo entenderíamos si lo llamaran «empalme» o «atajo», han utilizado el anglicismo bypass, que suena como más técnico y refinado, así que en versión castiza lo llamaremos «el baipás».

El proyecto no pasaría de una ocurrencia más en la aberrante política de transporte público de nuestros gobernantes si no fuese porque la broma va a costarnos más de 30 millones de euros y va a perjudicar seriamente a Córdoba. En primer lugar, porque esa cantidad figurará como inversión de los Presupuestos Generales del Estado en nuestra provincia, cuando no va a proporcionarnos ningún beneficio porque el tren pasará de largo por nuestro territorio. Más concretamente por el término municipal de Almodóvar del Río, que viene siendo el gran sufridor del AVE. Ya soporta las barreras e incomodidades que le representa el trazado de las líneas actuales, especialmente en la Barriada de Los Mochos. Si el baipás llegara a construirse, añadiría una nueva servidumbre a la población de este municipio, que ve pasar los años con su estación de ferrocarril cerrada y sin que el prometido tren de cercanías entre en servicio. Por otra parte, la comunicación ferroviaria directa entre Sevilla y Málaga privaría a Córdoba de la mayoría de servicios diarios de conexión con estas dos ciudades. Es evidente que si se reduce drásticamente el número de paradas del AVE en la estación cordobesa se ocasionará una discriminación y perjuicio a todas las personas usuarias y muy especialmente a quienes usan frecuentemente este medio por sus obligaciones laborales o familiares. Por añadidura, la pérdida de oportunidades de desplazamientos en tren a nuestra ciudad afectará indudablemente a la actividad comercial y turística.

En la Semana Europea de la Movilidad queremos denunciar que este proyecto es justamente el ejemplo de la política de movilidad insostenible, ruinosa y antisocial que hemos venido sufriendo en nuestro país durante las últimas décadas. Somos campeones en líneas de Alta Velocidad, muchas de las cuales no alcanzan niveles de utilización que las hagan rentables. Líderes en kilómetros de autopistas y en aeropuertos sin uso, como bien conocemos en Córdoba.

Sin embargo, se ha ido abandonando el transporte público más barato y con menor impacto energético, como son los trenes de cercanías con parada en los distintos núcleos de población. Se ha sustituido el transporte de mercancías en ferrocarril por pesados camiones que transitan las carreteras aumentando el consumo energético y contribuyendo a la congestión de las vías principales. Se han ido acumulando inversiones multimillonarias en grandes infraestructuras que han reportado escaso beneficio social y mucha deuda pública.

Córdoba necesita, en cambio, un buen servicio de trenes de cercanía que dinamice y favorezca la vertebración de los municipios de la provincia, que facilite la movilidad de los habitantes de nuestros pueblos, con recorridos de suficiente frecuencia y a un precio asequible. Exigimos que se ponga en servicio sin más demora el tren de cercanías periurbano y que vaya ampliando su extensión en el eje del Guadalquivir, desde Palma del Río hasta Villa del Río. Igualmente una línea de cercanías que conecte los municipios del sur desde Puente Genil hasta Córdoba. Necesitamos inversiones productivas que repercutan en oportunidades de desarrollo económico de la provincia y generen empleo. El proyecto del baipás del AVE entre Sevilla y Málaga solo representa derroche y perjuicios para Córdoba. Antes de que sea demasiado tarde, debemos conseguir que se paralice y que el dinero previsto se dedique a obras mucho más prioritarias en nuestra provincia. Hacemos un llamamiento a las instituciones públicas y a todos los agentes sociales, políticos y económicos para lograr que el Gobierno de España rectifique y no deje a Córdoba fuera de circuito.

* Comisión de Acción Ciudadana de Medio Ambiente y Sostenibilidad de Ganemos Córdoba