Los que trasladan a la sociedad en indignado mensaje la idea de que «la violencia no tiene género»... ¿qué persiguen con ello? Presentarse en el minuto de silencio convocado por el Ayuntamiento de Madrid tras el atroz asesinato de una mujer (por su expareja varias veces denunciada, y delante de sus hijas) con una pancarta con el lema referido, distinta a la que portaba el organismo oficial... ¿qué persigue, además de insultar a la víctima? No debieron acudir los dirigentes de Vox a la plaza de Cibeles, pues su presencia, más allá de toda la polémica desatada, ha sido una afrenta hacia la mujer asesinada y su familia. Por más que se insista en que la violencia puede ejercerla tanto el hombre como la mujer (pues claro) la estadística es apabullante. ¿Qué pasaría si cada semana los informativos reflejaran el asesinato de un varón a manos de su esposa o de su expareja? Un escenario difícilmente imaginable, ¿verdad? Porque son las mujeres las golpeadas, las asesinadas, las violadas. La violencia machista existe, los asesinatos de mujeres por el hecho de serlo a manos de varones que, en la mayor parte de las ocasiones, no son violentos con nadie más que con la persona con la que conviven también. ¿A qué negarlo? Mujeres y hombres salieron ayer a las calles de España, incluyendo Córdoba, en una movilización de «emergencia feminista» que vuelve a clamar contra una lacra a la que parece imposible poner freno. La noche fue violeta, frente al rojo de la sangre derramada.