Ni Messi, que ya está de vacaciones en su casa de Barcelona. Ni Cristiano, que anda meditando su marcha del Madrid, cansado de que no le valoren por ser quien fue y quien es. Ninguno de los dos es la estrella, hasta ahora, de este Mundial. Ese honor le pertenece al francés Kylian Mbappé, que ha impactado como nadie en el torneo ruso. Como si se estuviera materializando ante los ojos del mundo un relevo en el firmamento de estrellas, Mbappé lidera una suerte de cambio de guardia, aparcando a las dos estrellas que han copado en los útimos años los grandes premios individuales. No es el único futbolista que está brillando, pero la lista de los más destacados debe empezar con el descarado chico del Paris SG.

Kylian Mbappé

Mbappé es un joven francés de 19 años, capaz de cabalgar por las praderas rusas como si fuera un Usain Bolt de la vida. El heredero. El chico destinado a suceder a las bestias (Messi-Cristiano) que han dominado el fútbol mundial en la última década. Con permiso, claro, de Neymar, su compañero en el PSG. Pero Mbappé ha irrumpido como un búfalo en el Mundial. Dos goles espectaculares avalan al delantero francés. Solo Pelé en Suecia-1958, y con 17 años entonces, supera el registro de Mbappé en Rusia. Un salvaje delantero, indetectable para los defensas, sobre todo si son argentinos.

Phillippe Coutinho

Poco a poco va cogiendo Neymar la forma. Pero mientras llega ese momento y va Brasil superando obstáculos en el Mundial ha emergido la figura de Coutinho, el fichaje más caro de la historia del Barça. Inicia los partidos pegado a la banda izquierda, aunque no vive ahí de forma definitiva. Su movilidad, viene de fuera hacia adentro, unido a su exquisita calidad técnica conforman un cóctel explosivo. Más aún cuando Coutinho suelta esos envenenados disparos que le han transformado en el dueño del ataque del Brasil de Tite. Y eso es mucho decir cuando a su lado juega un tal Neymar. Mientras llega él, Cou va dando soluciones a todos los problemas.

Edison Cavani

El delantero del siglo pasado que triunfa en el futuro. En cada gesto derrama una parte de su vida, aunque sea una irrelevante carrera que él convierte en el prólogo de un fastuoso gol. Así sucedió, sin ir más lejos, en el primer gol de Uruguay a Portugal. Dos nueves (Cavani y Suárez) más alejados que nunca. Cada uno en una punta del campo. Edinson disfrazado de falso extremo derecho mientras Luis cabalgaba por la izquierda. El balón les comunicó de tal manera que el nueve del Barça centró con precisión para que el aún nueve del París SG firmara un gol de otro siglo. Un gol muy uruguayo.

Harry Kane

El goleador inglés por excelencia. No está ni se le espera, pero siempre llega a tiempo. Fiable, astuto e inteligente en el área. Nada mejor para definir a un delantero que gana partidos. Sin ir más lejos, en octavos ante Colombia, estuvo Harry Kane muy certero en el penalti del 1-0 y también en el primero de la tanda tras la prórroga. Es el máximo realizador del campeonato con seis dianas.

Luka Modric

El talento hecho futbolista. Pequeño, diminuto diríase, pero el balón se siente feliz cuando llega sus pies, incluso poco antes de que falle un penalti. Pero Luka Modric, ‘Lukita, como le llaman en el Bernabéu, es un mariscal que interpreta la batalla antes de que suceda. Con él, todo es más fácil. Y mejor.