El Ayuntamiento de Montilla deberá repetir el concurso-oposición por turno libre que convocó a finales del pasado año para cubrir una plaza de técnico medio de Cultura, después de que el titular del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 5 de Córdoba haya declarado la nulidad del procedimiento.

Según recoge la sentencia, el pasado 20 de marzo se presentó un recurso contra una resolución de Alcaldía que desestimaba, a su vez, otro recurso anterior contra la bases que debían regir el proceso de selección de personal y que había sido interpuesto por una de las aspirantes a ocupar una plaza vacante en la plantilla de funcionarios del Ayuntamiento.

La recurrente -que ha sido asistida por una letrada del despacho Criado y Espejo Abogados- entendía que el Consistorio había «vulnerado los principios de mérito y capacidad» al haber excluido del proceso de selección a personas con titulaciones del ámbito de las Humanidades, la Historia, el Arte y las Ciencias Sociales, «limitándolo al título de licenciado o de grado en Derecho, Economía, Ciencias Políticas y de la Administración, Ciencias Actuariales y Financieras».

Para el magistrado-juez que firma el fallo, «carece de sentido que al puesto de técnico medio de Cultura no puedan aspirar determinadas titulaciones relacionadas directamente con la cultura», toda vez que añade que la «potestad de autoorganización» de la que goza cualquier entidad pública «no permite tal proceder».

Tal y como detalla la sentencia, la Secretaría del Ayuntamiento de Montilla se opuso al primer recurso que interpuso la interesada alegando que si se habían exigido titulaciones relacionadas con el Derecho o la Economía era porque las funciones previstas para esa plaza se centraban, fundamentalmente, en las de «gestión presupuestaria y administrativa», mientras que las personas con titulaciones en Humanidades podrían optar, por su parte, a la plaza de coordinador de Actividades Culturales y Patrimonio que se preveía convocar a lo largo de este año 2018.

Por su parte, el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, defendió el proceso de selección de personal que llevó a cabo el Ayuntamiento. El primer edil puso en valor el trabajo realizado por el equipo de gobierno para ofertar hasta siete plazas de empleo público durante el pasado año 2017, con el objetivo de «paliar las carencias existentes en las diferentes áreas municipales» y aseguró que los requisitos para cubrir la plaza de técnico medio de Cultura «respondían a las necesidades de gestión en dicha área».

En este sentido, Llamas defendió que este concurso-oposición «pretendía dar respuesta a un perfil técnico en Cultura que gestionase recursos, personal y redactara pliegos de contratación derivados de la nueva normativa», de ahí que desde el Consistorio se entendiera que los aspirantes a ocupar esta plaza debían «tener conocimientos de Derecho o Economía por la propia idiosincrasia del servicio de Cultura, que implica una importante labor de gestión».