Dicho y hecho. Un mes después de que trascendiera la existencia de un informe de la Asesoría Jurídica de la Consejería de Salud en el que se defendía la necesidad de modificar la gestión de los Centros de Atención Infantil Temprana (CAIT), el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía acordó delegar la competencia de prestación de este servicio en 23 corporaciones locales de las provincias de Córdoba, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla, por un periodo de cinco años y una financiación de partida de unos 3,06 millones de euros anuales a cargo de la Junta.

La medida, que tiene carácter excepcional, se adopta de acuerdo con la Ley de Autonomía Local ante la próxima finalización de los convenios entre la Administración autonómica y estas entidades, que con la nueva legislación estatal de régimen jurídico del sector público no pueden ser prorrogados. «Se garantiza así la continuidad de un servicio del que se benefician más de 2.800 menores cada año», resaltaron desde el Ejecutivo autonómico.

De este modo, el Gobierno andaluz cumple con el compromiso que trasladó la propia delegada territorial de Salud, María de los Ángeles Luna, al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Montilla, al que aseguró que el servicio se iba a seguir prestando «en las mismas condiciones que se acordaron el año pasado».

Las corporaciones locales incluidas en esta delegación gestionan centros en Lucena, Montilla y Priego de Córdoba, en la provincia de Córdoba; Cartaya (Huelva); La Carolina, Linares, Úbeda y Villanueva del Arzobispo (Jaén); Alhaurín el Grande, Antequera y Vélez-Málaga (Málaga), y Constantina, Dos Hermanas, Estepa, El Arahal, Lebrija, Los Palacios, Morón de la Frontera, Osuna, Paradas, Sanlúcar la Mayor y Tomares, en Sevilla.

El cambio del modelo de organización del CAIT de Montilla generó el pasado año una intensa polémica que se solventó a mediados de septiembre con la firma de un convenio con la Consejería de Salud que venía a garantizar, por medio de una adenda de casi 54.000 euros, el nuevo sistema de funcionamiento que había planteado la Junta para este servicio.

Ya entonces, el Ejecutivo autonómico había propuesto para toda Andalucía una «evolución del servicio» que se traducía en que, de las sesiones grupales que se venían desarrollando hasta la fecha, se pasaba a sesiones individualizadas de una hora.