Una serie de multitudinarias manifestaciones están sirviendo para que los agricultores pongan de manifiesto su malestar e indignación por unos precios que suponen una verdadera ruina para su economía familiar. Ejemplo de ello ha sido la tractorada organizada días pasados, en la que participaron más de 4.000 de estos vehículos, que ocuparon las autovías de Málaga y del Olivar. Precisamente el cultivo del olivo está siendo uno de los más afectados y ello hace que esté cayendo de forma alarmante una actividad que es clave para la economía andaluza. Los olivareros denuncian que la situación se hace insostenible, a lo que se suma además la incertidumbre constante de las ayudas de la PAC y, por si fuera poco, una climatología adversa que agrava aún más el día a día de nuestros olivareros. Por ello, exigen soluciones urgentes para el sector agrario en general.