Nuestro país carece de servicios sociales que garanticen ingresos mínimos.

La verdad es diversa y cambiante y estamos encasilladas en unos parámetros rígidos y excluyentes que contribuyen a mantener la desigualdad; se sigue dando respuesta a problemas sociales con los ojos de siempre, perpetuando así la exclusión.

Por justicia social es necesaria Renta Básica Universal Incondicional que moralmente es justa y económicamente posible.