Lo único que nos pertenece en este mundo, es nuestra vida, y esta, por las circunstancias, tenemos que ponerla en manos de los profesionales de la medicina. Ellos son los que en los momentos difíciles, y no siempre ni con los medios ni con el tiempo que les gustaría, nos dan la esperanza de vida para seguir adelante.

Una carrera que además de sacrificada, es a la vez la que requiere una de las notas mas altas, y el tiempo para poderla obtener, más las especialidades, y que además tiene una gran parte de altruista, y vocacional. Pues bien, aquí nos encontramos que muchos profesionales dedicados a la medicina se encuentran muy mal retribuidos, además de en ocasiones incluso poco respetados.

En la sociedad que nos rodea, nos encontramos con que cantantes, futbolistas, tertulianos, políticos, etc etc, tienen mejor caché, y a veces hasta los llegan a idolatrar, dándoles un valor desproporcionado con arreglo a los profesionales, que con sus cuidados nos alargan la vida, (el mundo al revés). ¿Que en ocasiones no aciertan con sus diagnósticos, o resultados?, es cierto, pero en medicina a veces, dos más dos no son cuatro, y se presupone que hacen siempre lo que mejor consideran para sus pacientes, supeditados por las directrices, o limitaciones, que les marcan.

En definitiva, demos valor a los que se lo merecen, científicos, investigadores, médicos, y otras profesiones que nos ayudan a mejorar nuestra calidad de vida, y que se quedan en un segundo plano, sin quitar mérito a los que nos distraen, o divierten, pero primero es la salud y después viene lo demás.

Mi agradecimiento, y reconocimiento, a todos los profesionales del ramo, y en especial, al equipo de Urologia del Dr. Carrasco Aznar, y del Dr. Antonio Poyato, Aparto Digestivo así como a los ayudantes, y a todo el personal que hacen posible que sus pacientes se encuentren mejor, con sus atenciones y dedicación.