Con este titular salgo al paso para aclarar que la irrupción de Vox en la escena política en España es una necesidad. Y es así, porque nadie esperaba tanta adhesión a su programa. Porque el pueblo llano español, nuestro pueblo, está mucho más maduro que su clase dirigente. Por tanto se equivocan (como siempre) en el diagnóstico las izquierdas. No se regresa, ni se pierde al aplicar las directrices anunciadas en el programa de Vox, antes bien es lo contrario... ¡ganamos y nos salvamos! Pues la «nave nacional» (como símbolo de nuestra querida España) de continuar tal como va, no solo encallará, se hundirá y esto ya es percibido por muchos y hasta se palpa en la calle. ¡Nuestras CCAA. no pueden continuar tal como están! Nuestra deuda nacional junto a la de las comunidades autónomas, exige y requiere disminuir, frenarse y controlarla. Es por ello que una progresiva descentralización de ciertas competencias, (mal cedidas en su momento) y otras por duplicadas, mejoraría nuestra maltrecha economía. Por consiguiente, perder competencias... Es ganar y salvarnos todos. Cuando se determinó el desarrollo autonómico, «el mundo de internet», no había irrumpido plenamente. Hoy todos sabemos, que no hace falta ir al puesto de trabajo, pues desde «casa» (entiéndase «Gobierno central») puede realizarse mucho trabajo y ahorramos tiempo, personal y dinero. El programa de Vox, unido, completado y asumido por el Partido Popular, quien por dos veces, nos salvo de la quiebra dejada por los políticas socialistas (los cuales gobiernan siempre, endeudándonos), no constituye ningún regreso a tiempos pasados ni económico ni ideológico, no; es justo lo contrario. Es ganar y no perder, facilitando continuar avanzado, con y desde, una España más responsable, más madura y más democrática en verdad.
