Hoy 25 de noviembre, en todas las aulas de los institutos y los colegios del distrito estamos leyendo este manifiesto que ha sido elaborado por el alumnado del Ciclo Superior de 1º de Promoción para la Igualdad de Género del Instituto IES Galileo Galilei (Córdoba).

Mónica Linde (Barcelona) y su hija Ciara, Olga Savenchuck (Ciudad Real), Judith Sánchez (Barcelona), Liliana Mateescu (Toledo), María Concepción Jandro (Ciudad Real... y así hasta 1.072 mujeres que se contabilizan desde 2003. Cualquiera de ellas podría haber sido tu madre, tu abuela, tu amiga, tu prima, tu vecina… incluso tú.

Nos encantaría decir que esta es una cifra cerrada, pero la realidad es que crece cada día.

Lamentablemente ya son 41 las mujeres que este año no nos acompañan y solo son datos a nivel nacional de la peor consecuencia de la violencia de género, el asesinato.

Por este motivo estamos aquí para darle voz a aquellas que ya no la tienen, porque se la arrebataron. Queremos ser esa voz y aquí en este día, pedir que sean más los recursos invertidos en esta lucha, que no se quede todo en buenas intenciones, que se necesita una ley más fuerte y contundente, son necesarios más medios que nos respalden, más apoyos que nos acompañen.

Y no solo somos la voz de las que ya no están con nosotras, también de las que siguen aquí, y en silencio viven su pesadilla, para que sepan que no están solas, que se den cuenta de su realidad, que si nos necesitan aquí estamos, para vosotras.

Para esas mujeres que sufren en silencio, pedimos ayuda real y no tantas promesas. La lucha contra esta lacra social es tarea de todos y todas, porque solas no podemos hacerlo.

Por eso pedimos que aunemos esfuerzos y que se denuncie más, no ignoremos esa realidad. Es necesario empezar a educar desde pequeños y pequeñas, a ser miembros de una sociedad más igualitaria, donde a las mujeres tengan el lugar que le corresponde, y eso sólo se consigue con una nueva Educación no sexista.

Hay que visibilizar más a las mujeres, en los libros de texto, en los medios de comunicación, en la historia, en el día a día… no podemos seguir siendo ciudadanas de segunda, somos la mitad de la población mundial, pedimos que se nos trate por igual y se nos reconozcan nuestros derechos y nuestras aportaciones. Hoy más que nunca son necesarios referentes femeninos en todos los ámbitos, pero para eso es necesario nombrarlas: a las médicas, a las enfermeras, a las cajeras de supermercado, a las científicas, a las maestras, a las conductoras de autobús,… y a tantas otras mujeres que en su labor cotidiana transforman las lógicas de dominación y de violencia de nuestra sociedad por el cuidado y la vida.

El día 25 de noviembre es el día declarado por la ONU como Día Internacional Contra la Violencia de Género, hoy más que nunca, hay que preguntarse que está fallando, qué es lo que hay que hacer para que no sea asesinada ni una mujer más.

Para que no nos violen, ni seamos acosadas en nuestros trabajos, para que no nos maltraten por ser mujeres. Para que algún día no tengamos que nombrar a más víctimas, ni haya mujeres que sientan miedo, y para que llegue el momento en que este día sea una celebración y no una reivindicación o protesta…

A modo de conclusión planteamos que todos y todas tenemos que ser los oídos y los ojos que denuncien ese maltrato. Las mujeres queremos salir a la calle sin la incertidumbre de si volveremos a regresar, no queremos ser golpeadas, basta de ser humilladas y sexualizadas.

Reclamamos el derecho que nos corresponde por una Igualdad real que se lleve a cabo en la práctica y no sobre un papel. Exigimos ser escuchadas, respetadas y valoradas.

Esta lacra hay que combatirla entre toda la sociedad. Por todas, las que están sufriendo en silencio, las que han sufrido y las que ya no están con nosotras, para que no se siga repitiendo esta injusta tortura que nos afecta a nosotras pero que daña a toda la sociedad, cambiemos la violencia por el respeto, la comunicación, la igualdad... Aprendamos a bien tratarnos, a cuidar de la vida.

Muchas gracias por leernos