Hace un año que mi calle, Pedro López, y su aledaña, Gutiérrez de los Ríos, estaban en obras. Se renovaron en cuanto a pavimento y a pesar de las incomodidades de la obra el resultado fue satisfactorio. Sin aceras y con una superficie lisa se presentan aptas para transeúntes de movilidad reducida y dan a la zona un aire de zona peatonal puesto que están reservadas a tráfico restringido que además es poco frecuente.

Varios meses desde la terminación de las obras muestran un aspecto sucio, descuidado y en ningún caso imaginas que el pavimento haya sido renovado hace tan poco tiempo. En mi camino hacia la compra he hecho 22 fotos de manchas de orina de perros en fachadas, puertas de viviendas, papeleras, etc. También podemos hablar de las abundantes defecaciones sin recoger, pero esta vez quiero poner el foco en la orina que raramente es limpiada y va deteriorando las paredes y el pavimento donde es depositada. He enviado esta foto para intentar concienciar a vecinos y vecinas que dejan esta suciedad en lugares públicos donde todos convivimos convirtiéndolos en una cloaca.