Hoy, 20 de febrero, al encontrarme mejor, desearía dar enormemente las gracias al Hospital Quirón por su atención, cuidados y paciencia. Primero a mi cirujano de espalda, D. Ildefonso González Barrios. A los médicos y enfermeros de la UCI por la noche que les hice pasar. A la 3ª planta, en especial a la enfermera Yamila, que hizo de psicóloga también. Y a toda mi familia, por su apoyo, comprensión, amor.

Hacia ti, Antonio, compañero incondicional. Gracias.