Mantuve una conversación acerca de la maternidad con unas compañeras de trabajo (todas ellas entre los 25 y 30 años). Coincidieron en que con la vida actual que llevan no podrán ofrecerle unas mejores condiciones a un hijo. La primera razón es su bajo sueldo, ya que con lo que tienen apenas sobreviven. La segunda es que la mayoría no tiene pareja estable. Y la tercera, que su vida laboral apenas evoluciona y eso hace que necesiten de terceras personas para criar un bebé. ¿Por qué nos fijamos en todos estos detalles? ¿Es que el dinero nos garantiza una mejor crianza? Nuestras abuelas tenían entre tres y siete hijos (en algunos casos) y con lo que tenían los sacaban adelante. ¿Es la sociedad la que empuja a las mujeres a posponer su maternidad? ¿O ahora el coste de la vida es mayor?