Hace unos días me llamó la atención, escuchando el telediario, la interesante y grata noticia de la apertura al público de unas minas en Castilla-León para ser visitadas en todo su interior. En concreto, creo que se encuentran en la comarca de Burgos.

Dicha crónica me alegró bastante y ojalá se pudieran extender estas iniciativas a todas las existentes en el territorio español, ya que la riqueza, belleza y amplias curiosidades que poseen las profundidades de la Tierra es impresionante. La cantidad de minerales (estalagmitas y estalactitas) y tesoros que nos podemos encontrar debajo de nuestro suelo no hace más que ampliar la rica ciencia arqueológica española. Resulta algo misterioso y muy interesante lo que se oculta en las capas interiores de nuestra corteza terrestre y puede servir de un gran valor humano para el futuro de la investigación española.

¡Enhorabuena a los promotores de tan feliz iniciativa y espero que otras tantas minas de nuestra península Ibérica puedan acogerse al plan de visitas, por el bien del conocimiento español.