Muy bonitas todas las cruces presentadas, pero para mí que ha faltado una, aunque fuese fuera de concurso: la Cruz de Juarez, situada en un lugar despejado, visible desde todos los ángulos y bien comunicado, ante el Centro Cívico Municipal de Santa Rosa. Con muy poco hubiese quedado preciosa.
Creo que no han existido iniciativas de la vecindad ni de nuestro Ayuntamiento, al menos con suficiente fuerza. Pero no van por ahí «mis tiros».
Lo que me duele de esta cruz tan bien plantada es que, desde siempre, en la «Cuna de la Cultura y de Sabiduría Clara Fuente», no sepamos los cordobeses ni visitantes, qué narices pone en la losa de la peana, porque resulta ilegible. No sería mucho pedir al edil correspondiente, o al Pleno del Ayuntamiento, que se regrabe el texto o se sustituya dicha losa para que podamos saber qué dice allí.
A pocos metros del lugar emerge una enorme válvula de Emacsa, lujosamente rotulada como si fuese una obra de arte. Cuando aquello estaba ejecutándose tuve la satisfacción de conocer por los trabajadores, que no se trataba de un monumento a Belén Esteban ni personaje similar, sino de la mejora de la red de aguas potables.
Diego Gómez Palacios
Córdoba
