Venezuela enfrenta dos días de huelga general, miércoles y jueves, convocada por la oposición que ha lanzado un ultimátum al presidente Nicolás Maduro para que no celebre las elecciones para una Asamblea Constituyente previstas para el próximo domingo.

Pero el Gobierno chavista avanza con paso firme hacia las elecciones mientras el servicio de inteligencia sigue efectuando detenciones. Maduro ha reafirmado la irreversibilidad de su proyecto para redactar una nueva Carta Magna y ha convocado para el jueves, coincidiendo con el último día de paro, un gran acto de cierre de campaña al que pidió que acudan seguidores de todo el país.

En este contexto, crece la preocupación por la posibilidad de confrontaciones violentas en los próximos días. El expresidente mexicano Vicente Fox ha declarado que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, tiene miedo a una sublevación militar, y ha alertado de una posible masacre el próximo domingo.

Los ciudadanos, mientras tanto, hacen acopio de comida y velas ante la incertidumbre reinante y el desconocimiento del grado de seguimiento de las dos jornadas de paros.