El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, cree que es posible conceder la «prórroga corta» que pide Theresa May para evitar un divorcio caótico el próximo 29 de marzo pero siempre y cuando la Cámara de los Comunes se pronuncie positivamente la próxima semana a favor del acuerdo de retirada cerrado entre la UE y el Gobierno británico.

La decisión final está en manos de los líderes de los Veintisiete, que son quienes deberán decidir por unanimidad si aceptan o no la prórroga y por cuánto tiempo.

«En línea con las consultas que he mantenido en los últimos días creo que una extensión corta será posible pero estará condicionada al voto positivo del acuerdo de salida en la Cámara de los Comunes», explicó Tusk. Según el dirigente, todavía está por definir es la duración de esa prórroga porque la fecha del 30 de junio plantea problemas «de naturaleza legal y política».

Según la opinión de los juristas de la Comisión Europea, cualquier aplazamiento más allá del 23 de mayo, en que arrancan las elecciones al Parlamento Europeo, obligará al Gobierno británico a convocar elecciones a la Eurocámara en el Reino Unido. Así se lo explicó el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, a la propia Theresa May antes de que la líder de los tories remitiera a Tusk su carta informándole de la petición de prorrogar el artículo 50 hasta el 30 de junio. «El presidente ha avisado claramente a la primera ministra que de que no debía incluir una fecha de la prórroga posterior a la celebración de las elecciones al Parlamento Europeo», precisó Margaritis Schinas, portavoz de la CE. May, sin embargo, anunció la petición de prórroga de tres meses.

Frente a la opinión estricta de los servicios jurídicos de la Comisión, los del Consejo estiman que la fecha tope de la prórroga podría prolongarse hasta el 2 de julio, el día en que se constituye el nuevo Parlamento Europeo. «Son dos servicios jurídicos diciendo dos cosas no radicalmente distintas pero con acento distinto», explica un alto diplomático.

¿OTRA CUMBRE? / Esta es una de las cuestiones que tendrán que dirimir los líderes de la UE hoy. El brexit es el primer asunto pero todo apunta a que no habrá decisión final. «Lo único claro es que hay que tomar una decisión antes del 29 de marzo», dijo un diplomático. ¿Habrá otra cumbre la próxima semana para la decisión final? Aunque el presidente de la Comisión Europea ha dado por hecho que será necesaria, de momento esta nueva cita no entra en los planes de Tusk. «Si hay un voto positivo podremos formalizar la decisión por procedimiento escrito» pero «si hay necesidad no dudaré en invitar a los miembros del Consejo Europeo a otra reunión en Bruselas la próxima semana», explicó.