A la Unión Europea se le ha agotado la paciencia. Todos los intentos por reconducir el diálogo en Venezuela han caído en saco roto y los 28 han decidido dar un paso más con vistas a redoblar la presión sobre el régimen de Nicolás Maduro. Los ministros de Exteriores de la UE han aprobado por unanimidad la base jurídica que les permitirá imponer sanciones selectivas contra dirigentes venezolanos que violen los principios y derechos humanos y un embargo de armas y material susceptible de ser utilizado para la represión.

La decisión fue pactada a mediados de la semana pasada por los embajadores permanentes de los 28 y este lunes ha sido refrendada por los jefes de la diplomacia europeos. La falta de avances sobre el terreno y las irregularidades detectadas en las elecciones regionales celebradas en el país el pasado 15 de octubre han hecho saltar de nuevo las alarmas en la UE. “Estos desarrollos han acentuado la polarización política en el país”, alerta la diplomacia europea en sus conclusiones.

Los 28 evitan imponer sanciones pero preparan su artillería legal por si hiciera falta activarlas. En relación con las medidas restrictivas contra miembros del régimen venezolano, como es habitual consisten en la congelación de cuentas y activos y en la prohibición de viajar a Europa y se aplicarán a aquellos dirigentes venezolanos que vulneren principios democráticos, derechos humanos o el Estado de derecho. De momento no hay una lista cerrada con nombres de potenciales candidatos, que debe recibir un apoyo unánime, pero ya han empezado a trabajar sobre ella. Fuentes diplomáticas apuntan que se trataría de personas de segundo nivel. En cuanto al embargo de armas, no afectará a los contratos que ya están firmados salvo si se trata de material que pueda utilizarse para la represión.

Aplicación gradual y flexible

Los 28 recuerdan que las medidas se utilizarán de forma “gradual y flexible”, que pueden ampliarse y también revertirse en función de cómo evolucione la situación en el país. Es decir, si el régimen de Maduro accede a celebrar “negociaciones creíbles y significativas”, si respeta “las instituciones democráticas”, “la aprobación de un calendario electoral completo” y “la liberación de todos los presos políticos”. Según recalcan los 28 en la declaración aprobada, estas medidas fueron diseñadas para no dañar a la población venezolana.

“La principal responsabilidad para terminar la crisis en Venezuela radica en el país. La Unión Europea hace un llamamiento al Gobierno para que restablezca urgentemente la legitimidad democrática, incluso mediante elecciones libres y justas, y a la oposición para continuar participando de una manera unida hacia una solución negociada a las tensiones actuales, en interés del país”, reclaman los 28.

Entre las instituciones que han mostrado inmediatamente su satisfacción destaca el Parlamento Europeo que precisamente ha concedido el Premio Sajarov de este 2017 a la oposición venezolana. “Las sanciones contra el Gobierno de Venezuela son la decisión correcta y llevan al camino hacia la democracia”, ha valorado el presidente del Parlamento Europeo, el italiano Antonio Tajani.