La visita de Estado del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al Reino Unido se llevará a cabo en el 2018, no este año como se esperaba, según han dicho fuentes del Gobierno del Reino Unido a la cadena de televisión Sky News. Theresa May invitó al mandatario estadounidense durante el viaje que la primera ministra hizo a Washington el pasado mes de enero, aunque desde entonces no se había fijado una fecha de manera oficial.

Según Londres, el motivo del aplazamiento es que May y Trump no han podido ajustar sus agendas para celebrar el encuentro este año, aunque algunas fuentes aseguran que el inquilino de la Casa Blanca ha preferido aplazar el viaje ante el temor a que hubiera una oleada de protestas por su visita.

De hecho, desde que May anunció la invitación no han parado de llover críticas a la primera ministra. Tanto el líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn, como los demócratas liberales y el Partido Nacional Escocés (SNP) pidieron en numerosas ocasiones que se cancelara la invitación. También lo solicitaron miembros del mismo del Partido Conservador de la primera ministra. Como visita de estado, incluye una cena con la reina Isabel II y un discurso ante el Parlamento.

RACISMO Y SEXISMO

También criticó el viaje el portavoz de la Cámara de los Comunes, John Bercow, que dijo el pasado mes de febrero que no permitiría que Trump pronunciara un discurso en el Parlamento británico. «Ya estaba en contra de que el presidente Trump hablara en el Palacio de Westminster antes incluso de que prohibiera la entrada migrantes a Estados Unidos. Después de la prohibición, estoy aún más en contra", dijo entonces. Bercow añadió que la "Cámara de los Comunes no reconoce el racismo, el sexismo y apoya la igualdad de todos ante la ley"

Más de 160 diputados de un total de 650 firmaron una moción contra los comentarios de Trump en contra de la inmigración, las mujeres y a favor de la tortura. Más de 1,8 millones de británicos firmaron, a su vez, una petición en contra del viaje, con el argumento que podría ser "embarazosa" para la reina.

Los rumores sobre una posible cancelación aumentaron el pasado mes de junio, cuando May no hizo mención alguna de la visita durante el discurso de política general en el Parlamento. Aún así, este pasado fin de semana, en la cumbre del G-20 de Hamburgo, Trump dijo que realizaría el viaje a Londres, aunque no precisó la fecha.