La coalición liderada por Estados Unidos bombardeó áreas residenciales de la ciudad de Al-Shaafa, en la provincia de Deir Ezzor, noreste de Siria, lo que provocó la muerte de 11 civiles, miembros de una misma familia, informaron medios estatales.

La agencia de noticias SANA indicó que los aviones de guerra de la coalición lanzaron ataques en la ciudad bajo el pretexto de combatir a los terroristas islamistas, pero la masacre se suma a decenas de masacres anteriores perpetradas por esa coalición en Deir Ezzor.

Esta información la confirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, quien detalló que entre los muertos hay cinco menores, y advirtió de que la cifra de los fallecidos podría aumentar porque hay heridos graves. Además, la agresión causó grandes daños en las casas y las propiedades, añadió SANA en un despacho que citó fuentes civiles.

BOMBARDEOS CONTRA YIHADISTA

La coalición de Estados Unidos está llevando a cabo operaciones militares contra los militantes del grupo yihadista armado Estado Islámico (EI) en Siria y en Irak, pero en el caso sirio sus acciones no están autorizadas por el gobierno local ni por el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Asimismo, la aviación de la alianza continuó los bombardeos contra los reductos de los yihadistas al este del Éufrates. Más de mil civiles lograron escapar de los territorios dominados por los radicales y blanco de los ataques terrestres y aéreos, según la ONG, que calcula que un total de 12.450 personas ha huido de esas zonas desde el pasado mes de diciembre.

EL CONTROL DEL ESTADO ISLÁMICO

El Estados Islámico (EI) todavía controla algunas áreas y localidades en esta región de Siria, después de haber perdido la mayor parte de sus dominios a manos de las FSD, que reciben el apoyo de los aviones de la coalición y, hasta el momento, de fuerzas estadounidenses sobre el terreno.

Apenas el mes pasado, el presidente estadunidense Donald Trump anunció el retiro de dos mil soldados de Siria, sin embargo el ejército de Estados Unidos ha incrementado su campaña de bombardeos en áreas aún controladas por el grupo EI en el este del país.

Un reporte de investigación conjunta, realizada por la cadena de noticias Al Yazira y la revista electrónica The Intercept, informó que los ataques más feroces de la semana pasada ocurrieron en Al-Kashmah, una aldea a orillas del río Éufrates, cerca de la frontera con Irak.

Refiere que en medio de los bombardeos y el fuego de artillería por parte de las Fuerzas Democráticas Sirias, con respaldo estadunidense, familias enteras se han visto obligadas a huir hacia el sur y las únicas personas que quedan allí son combatientes que forman la primera línea de la guerra contra el EI.