Inmigrantes a bordo del Acquarius. / AP / KENNY KARPOV“Gracias al buen corazón de España, hemos marcado un punto a nuestro favor”, ha manifestado Matteo Salvini, secretario de la Liga, ministro de Interior y vicepresidente del Gobierno populista presidido por Giuseppe Conte. “Agradezco a las autoridades españolas el gesto, es cuanto esperábamos”, añadió Conte poco después.

“No nos dejéis solos”, había pedido Conte en la noche del domingo después de una reunión de urgencia con sus vicepresidentes y verdaderos apoderados del Ejecutivo, Salvini y Luigi Di Maio, también ministro por los indignados del Movimiento 5 Estrellas (M5S). “Gracias España, Italia ha violado las normas internacionales”, tuitó en la tarde del lunes el presidente de Malta, Joseph Muscat.

A pesar de ser vicepresidente y ministro, Salvini dio extrañamente la rueda de prensa desde la sede de la Liga en Milán y no desde alguno de los palacios del Gobierno, mostrando su “satisfacción por como se va resolviendo el caso de la nave Aquarius”.

El ministro se reafirmó en el hecho de que “levantar la voz de manera constructiva, en la UE funciona”, pero que la cuestión “no termina con este caso”. “Hemos abierto un frente para una nueva política migratoria continental”, añadió, mostrando su orgullo porque “en nueve días de estar en Interior, hemos recuperado años de adormecimiento, aunque la cuestión no haya terminado”.

Otras 790 personas rescatadas

Según ha informado la Organización Internacional de Migraciones (OIM), otras 790 personas han sido salvadas en las últimas horas por barcos mercantes que transitaban frente a Libia y navíos militares de los dispositivos Eunavformed y Frontex para el control de las fronteras externas de la UE. De acuerdo con el sistema de salvamentos, los 790 inmigrantes deberán ser trasbordados a otras naves para llevarlos hacia “un puerto seguro”, que nadie sabe aún cual será.

La breve odisea del Aquarius y las que probablemente seguirán en los próximos días coinciden con una curiosa inactividad de la Guardia Costera de Libia, que ya no intenta interrumpir las salidas de emigrantes del país. Paralelamente, en el sur de Libia, por donde entran los emigrantes subsaharianos, las 100 tribus que, de acuerdo con el anterior Gobierno de Roma, controlaban las fronteras, resultan haberse esfumado, según ilustran fuentes oficiosas.

Propaganda electoral

De manera que la llegada del buen tiempo podría presagiar nuevas y masivas llegadas de emigrantes hacia Europa, como sucedió en los veranos pasados. “No doblegaremos la cabeza”, ha tuitado Salvini, verdadero factotum del nuevo Ejecutivo italiano, aún más después del nuevo avance electoral de su partido en las municipales parciales celebradas este domingo. Quienes en Italia no piensan como Salvini le reprochan que siga actuando como si estuviera aún “en campaña electoral”. “Abandonen la propaganda y empiecen a gobernar”, mandan decir desde la patronal Confindustria.