Tras vencer en las elecciones presidenciales celebradas el pasado 18 de marzo, Vladímir Putin tomará posesión de su cargo en una grandilocuente ceremonia que tendrá lugar este lunes por la mañana en el Kremlin. Con este acto, arrancará el que debería ser su cuarto y último mandato como presidente de Rusia, ya que la Constitución impide a una misma persona acumular más de dos presidencias seguidas.

Acometer la reforma de la economía dado el actual estancamiento, con medidas impopulares como la subida de impuestos o el aumento de la edad de jubilación será, junto con la gestión de las crecientes tensiones con Occidente, los principales retos de la presidencia que arranca este lunes. Además, en el periodo de seis años que se inicia, deberá dirimirse la cuestión de la sucesión, ya sea nombrando a un delfín,ya sea reformando la Carta Magna y suprimiendo la provisión que impide al líder del Kremlin seguir en el cargo.