El buque insignia de la organización no gubernamental Proactiva Open Arms, que arribó el pasado viernes por la mañana al puerto de Lesbos (Grecia) cargado con ayuda humanitaria, lleva desde entonces fondeado fuera del puerto a la espera de que le autoricen a atracar y descargar.

"Esperemos que antes de 100 días nos permitan entrar y entregar las 20 toneladas de ayuda humanitaria para sus campos de refugiados. Y eso que no hemos rescatado a nadie", ha tuiteado el director y fundador de la ONG, Òscar Camps.

Según ha informado a Efe una portavoz de Open Arms, el motivo aducido por la autoridad portuaria de Lesbos es que no hay espacio libre para atracar por el calado del barco, un antiguo remolcador de altura reconvertido en buque de rescate.

El barco llegó el viernes a las nueve de la mañana al puerto de Lesbos, el mismo puerto donde hace casi cuatro años un puñado de voluntarios de la ONG catalana inició sus labores de rescate, entonces solo con salvavidas y motos acuáticas.

"El viernes nos dijeron que hasta el lunes no podríamos pasar aduanas, pero hoy ya ha pasado y seguimos esperando", ha señalado la portavoz de Open Arms, que no entiende las "trabas administrativas" para descargar la ayuda humanitaria.

PRETENDÍAN DESCARGAR EL LUNES

La previsión de la ONG era poder descargar el lunes en Lesbos y zarpar al día siguiente hacia Tesalónica, el tercer puerto previsto para descargar ayuda, tras hacerlo hace unos días en la isla griega de Samos.

El buque de la ONG Proactiva Open Arms llegó el pasado martes a Samos tras una semana de travesía por el Mediterráneo desde el puerto de Barcelona y sin haber efectuado ningún rescate en alta mar, con el objetivo de entregar material humanitario.

El Open Arms zarpó el 23 de abril desde el puerto de Barcelona, donde llevaba bloqueado más de cien días, para llevar ayuda humanitaria a los puertos griegos de Samos, Lesbos y Tesalónica, pero no para participar en tareas de rescate de inmigrantes en el Mediterráneo central.

La carga más importante del total de 20 toneladas que lleva el barco de rescate son productos de higiene y comida para las personas de los campos de refugiados griegos, aunque también transporta material escolar, ordenadores y bicicletas para mejorar la movilidad en los campos de refugiados.

El Open Arms recibió el permiso para salir hacia las costas griegas el 17 de abril, pero con la condición de no desviarse del camino y entrar en la región de búsqueda y rescate (zona SAR) del Mediterráneo central, algo que el director de la ONG, Óscar Camps, tildó de "amenaza" porque han sido apercibidos de multa si lo hacen.

Aun así, el jefe de operaciones de Open Arms, Gerard Casals, advirtió en declaraciones a Efe de que si se encontraban con una situación de emergencia en el camino, "ayudaremos -dijo- como lo hacemos siempre porque nos obliga la ley del mar".