El Gobierno de Nicolás Maduro no tardó en responder ayer a los países europeos que han decidido darle la espalda y reconocer a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela hasta que se celebren elecciones presidenciales, lo que en la práctica implica el desconocimiento efectivo de la legitimidad del nuevo mandato de seis años que juró Maduro ante el Tribunal Supremo hace ahora casi un mes.

A través de un comunicado hecho público ayer, el Ministerio de Asuntos Exteriores advirtió de que «a partir de este momento revisará integralmente» las relaciones con estos países hasta que lleven a cabo «una rectificación que descarte su respaldo a los planes golpistas y las reencauce hacia el respeto irrestricto del derecho institucional».

El texto, en el que se califica de «alarmante el grado de subordinación» de estos gobiernos europeos a la «política guerrerista» de Estados Unidos, señala además que la soberanía de Venezuela «no está sujeta a ninguna clase de reconocimiento por parte de autoridad extranjera alguna. Denunciamos que esta decisión viola los principios y prácticas que rigen las relaciones diplomáticas, sentando un precedente peligroso para la convivencia pacífica entre las naciones».

Paralelamente a este comunicado, el presidente Maduro pidió ayer a los gobiernos «independientes» del mundo que condenen y rechacen las amenazas del mandatario estadounidense, Donald Trump, quien reiteró el pasado domingo en una entrevista a una cadena de televisión estadounidense que no descarta la opción militar como vía para sacar del poder al líder chavista. «Venezuela hace un llamado a los gobiernos independientes del mundo a que declaren su rechazo a las amenazas que hizo Donald Trump el día de ayer (por el domingo), otra vez, contra Venezuela. Él cree que nosotros nos atemorizamos», señaló Maduro en un acto con militares en el estado de Aragua (norte) y que fue transmitido por televisión.

CARTA AL PAPA / El mandatario venezolano reiteró que no dejará su cargo y aseguró que las «amenazas» de Trump «violan la carta de Naciones Unidas» y los derechos «fundamentales». «¿Cuál es la causa que tiene Donald Trump para declararle una guerra militar a Venezuela? ¿El petróleo, el hierro, el aluminio, el oro, el gas, el agua?», se preguntó.

El presidente venezolano envió además una carta al papa Francisco, que está de viaje en los Emiratos Árabes Unidos, en el que le pide que ayude a «facilitar y reforzar el diálogo» en Venezuela.

Maduro reveló que a partir de mañana el oficialismo comenzará a recoger firmas entre la población venezolana para rechazar las amenazas de EEUU y enviarlas posteriormente a la Casa Blanca. «No queremos intervención gringa, no queremos guerra, queremos paz con independencia, paz con dignidad (…) pero dice un viejo adagio si quieres paz prepárate para defenderla, si quieres paz prepárate para ejercerla; por eso estamos en una marcha militar permanente», señaló ayer el líder chavista en un acto televisado.

También anunció que del 10 al 15 de febrero se llevarán a cabo los ejercicios militares «más importantes de la historia» de Venezuela porque se afinará el sistema de armas y de artillería.

Por otro lado, Guaidó, denunció ayer que el Gobierno de Maduro intenta transferir más de 1.000 millones de dólares (874 millones de euros) a Uruguay. «Están intentando mover desde Bandes un dinero que está en una de las cuentas de Uruguay. Hago un llamamiento a Uruguay para que no se preste a que roben parte del dinero, podemos estar hablando de entre 1.000 y 1.200 millones de dólares», afirmó el autoproclamado presidente interino.