Al menos 22 personas han muerto y 70 han resultado heridas en un atentado con un coche bomba cerca de un mercado y una mezquita chií para mujeres de la localidad de Parachinar, en el cinturón tribal del noroeste de Pakistán y cercano a la frontera afgana. Entre las víctimas hay mujeres y niños.

El atentado, que han reivindicado los talibanes, se ha producido poco antes del rezo del viernes con un coche bomba que estaba aparcado en las inmediaciones del templo chií y un mercado, indicó Sajid Hussain, parlamentario de la región donde ocurrió el ataque.

Las autoridades locales han declarado el estado de emergencia en la zona y puesto todos los hospitales en alerta. El Ejército ha enviado helicópteros a la zona para evacuar a los heridos.

El primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, ha expresado su condena en un comunicado y ha reiterado su determinación para acabar con el terrorismo. "La red de terroristas ha sido rota y es nuestra obligación nacional continuar esta guerra hasta la completa aniquilación del terrorismo en nuestro suelo", ha asegurado Sharif.

OPERATIVO MILITAR

Parachinar, zona de mayoría chií, es escenario habitual de actos violentos por parte de la insurgencia suní y el pasado enero una bomba acabó con la vida de 22 personas e hirió a 87 en un mercado local.

El atentado se ha producido después de que una seria de ataques con unos 130 muertos en la primera quincena de febrero provocase que el Ejército lanzase un nuevo operativo militar en todo el país contra la insurgencia bautizada como operación Radd-ul-Fasaad ("Eliminación de la discordia").

Ese operativo es la continuación de la operación Zarb-e-Azb (Afilado y cortante), que se puso en marcha en las zonas tribales en junio de 2014 y en la que murieron unos 3.400 supuestos insurgentes y ayudó a reducir significativamente la amenaza terrorista en el país.