Emmanuel Macron ha nombrado a Jean Castex nuevo primer ministro en sustitución de Edouard Philippe, que este viernes ha presentado este viernes su dimisión y la de todo su equipo, abriendo así la puerta a una remodelación gubernamental con la que el presidente francés quiere abrir una nueva etapa política después del fracaso en las elecciones municipales.

Castex, de 55 años, era hasta ahora el hombre encargado de pilotar la fase de desescalada que Francia inició el pasado 11 de mayo, tras el confinamiento decretado para hacer frente a la extensión del coronavirus. Alto funcionario, educado en la prestigiosa Escuela de Administración Nacional (ENA), fue secretario general adjunto de Nicolas Sarkozy.

Su perfil no dista mucho del de Philippe, que ha estado al frente del Ejecutivo durante tres años y este viernes ha llegado Matignon sonriente, con camisa blanca, sin traje ni corbata, acompañado por el cámara de su amigo Laurent Cibien, que prepara un documental sobre él. La composición del nuevo gobierno se conocerá antes del próximo miércoles, cuando se reuna el Consejo de Ministros.

El pasado mes de abril, el presidente adelantó su intención de "reinventarse" sin renunciar a las reformas iniciadas en el primer tramo del mandato. En ese momento ya dejó en el aire la posibilidad de cambiar de primer ministro para hacer visible una nueva etapa que que la epidemia de coronavirus y el desastroso resultado de La República en Marcha en las elecciones municipales no ha hecho más que acelerar.

Los comicios locales, celebrados con una abstención récord de casi el 60%, se han saldado con un avance notable de los verdes pero los responsables de Europa Ecología Los Verdes han descartado la entrada en el próximo Gobierno al considerar que ni l ecología ni lo social forman parte del centro de gravedad del Ejecutivo de Macron.

Fase de reconstrucción

En cualquier caso, la llamada 'marea verde' ha empujado al presidente a tener en cuenta las aspiraciones medioambientales del electorado francés y a dar un giro a su política.

En una entrevista publicada este viernes en la prensa local, Macron reconoce que el inicio del próximo curso político será "difícil". El principal reto del próximo ocupante del Palacio de Matignon será liderar la reconstrucción económica y social del país como consecuencia de la crisis del coronavirus.

Con un amplio respaldo en las urnas, el primer ministro francés, elegido alcalde de Le Havre el pasado domingo, podrá regresar a la ciudad normanda para ocupar el Ayuntamiento, ahora que Macron ha optado finalmente por relevarle del cargo para escenificar el cambio que quiere imprimir a lo que queda de legislatura, un tramo que marca también el inicio de la carrera hacia las presidenciales del 2022.

Macron y Philippe se reunieron este jueves en el Elíseo y los dos se mostraron de acuerdo en la necesidad de contar con un nuevo gobierno para encarnar el "nuevo camino" del mandato presidencial.

"Orgulloso de estos 1145 días de Edouard Philippe en Matignon y gracias a Emmanuel Macron por haber confiado en él", ha tuiteado el eurodiputado Gilles Boyer, amigo íntimo y ex consejero del ya ex primer ministro.