Militares prorrusos campan a sus anchas en Crimea. Un grupo de hombres armados, supuestas fuerzas rusas, ha irrumpido este viernes con un camión en una base de defensa antimisiles en la región ucraniana de Crimea y se han hecho con el control momentáneo de las instalaciones sin disparar un solo tiro, según un testigo de Reuters. Después se han retirado sin que se hayan producido heridos. Un portavoz del Ejército ucraniano, Vladislav Selezniov, ha confirmado la pérdida temporal del control de esta base.

Ha sido el caso extremo de las muestras de fuerza que se registran en la república independiente de Crimea. Instalaciones militares de todo tipo cercadas y amenaza latente. Algunos parecen militares, otros, con ropa civil, en ocasiones llevan brazaletes con un texto que reza 'bloque ruso'.

En este contexto de movilización armada por parte de fuerzas prorrusas, está previsto que un destructor de la armada estadounidense llegue este sábado al puerto rumano de Constanza, en el mar Negro. El objetivo es realizar unas maniobras militares con Rumanía y Bulgaria, algo que puede incrementar la tensión militar en la zona.

"Entre el periodo del 8 al 11 de marzo, la nave USS Truxtun estará en el puerto de Constanza para realizar una visita de rutina y maniobras comunes con Rumanía y Bulgaria", confirmó a Efe la embajada de Estados Unidos en Bucarest.

En Sebastopol, Crimea, está la base de la flota rusa en el mar Negro, que incluye medio centenar de buques de guerra -acorazados, fragatas, submarinos y dragaminas- y casi un centenar de aviones.