Estados Unidos ha lanzado este jueves en Afganistán una GBU-43/B, conocida como “la madre de todas las bombas”, para atacar objetivos del Estado Islámico (EI). Se trata de la primera vez en que EEUU usa en una operación militar este arma, la mayor bomba no nuclear en su arsenal, que se desarrolló durante la guerra de Irak. La zona bombardeada es donde el fin de semana pasado murió en combate un soldado de las fuerzas especiales de EEUU.

Fuentes militares han confirmado a varios medios estadounidenses el uso de la masiva bomba, que pesa 9,5 toneladas, de las cuales 8,4 son explosivos de alta potencia en su cono armado. El objetivo, según le han dicho a CNN, eran túneles y operativos del EI en el distrito de Achin, en la provincia de Nangarhar. Las fuerzas armadas de Washington están estudiando ahora el daño provocado en la operación, que según las fuentes fue autorizada por el general John Nicholson, que se encuentra al frente de las fuerzas estadounidenses en Afganistán,

La bomba se lanzó desde un avión MC-130 operado por el Mando de Operaciones Especiales de las fuerzas aéreas.