El Gobierno de Ecuador anunció que elaborará un modelo de ordenanza para los municipios del país, que busca reducir el uso del plástico y contribuir a la protección y conservación del medioambiente.

Esa es una de las conclusiones que arrojó un encuentro entre autoridades del Ministerio ecuatoriano del Ambiente y dirigentes de gobiernos locales, cuyo objetivo fue impulsar políticas y estrategias para la conservación de los recursos naturales.

Más de un centenar de alcaldes y prefectos de varias provincias ecuatorianas participaron en la reunión, en la que se suscribió un memorando de entendimiento para trabajar en una "ordenanza modelo para la reducción de plásticos de un solo uso".

El acuerdo tiene como objetivo establecer vínculos de cooperación interinstitucional que ayuden a aplicar normas para reducir el uso del plástico, uno de los principales contaminantes en el mundo.

ESTRATEGIAS ECOLÓGICAS

El ministro de Ambiente, Marcelo Mata, aseguró que "gracias al compromiso de las autoridades locales" se ha logrado avanzar en la discusión de diferentes estrategias para "responder a las necesidades nacionales del desarrollo basado en la sostenibilidad". Ello a través "de mecanismos de conservación, restauración y transparencia" que se incluyen dentro de los ejes de la Estrategia "Reverdecer Ecuador", una iniciativa impulsada por el Gobierno, sostuvo Mata.

Pedro Palacios, alcalde de Cuenca, resaltó durante el encuentro la importancia del trabajo conjunto para alcanzar el desarrollo social y ambiental del país. "El manejo de desechos sólidos es una prioridad. Debemos trabajar en reformas y políticas que limiten la utilización de plásticos de un solo uso, pues todas las provincias del país deben ser espacios libres de basura", remarcó Palacios.

ELIMINAR LOS DESECHOS PLÁSTICOS

En enero pasado, el legislador ecuatoriano Esteban Albornoz presentó un proyecto legal para la eliminación progresiva de desechos de plástico en todo el país. Esa iniciativa busca que para el año 2020, el Ejecutivo implemente más servicios y proyectos ambientales para la ciudadanía, que permita la eliminación de plásticos de polietileno, como vasos, platos, cucharas y otros objetos.

En abril del año pasado, el Gobierno ecuatoriano anunció una campaña para convertir al de Galápagos en "un archipiélago libre de plástico", ya que actualmente se restringe el uso de sorbetes, fundas tipo camiseta, espuma flexible y botellas plásticas desechables.

Un 90 por ciento del total de desechos sólidos recogidos por voluntarios en las áreas costeras de las islas Galápagos provienen de zonas exteriores, como de la costa continental ecuatoriana, de Perú, Chile, China, Filipinas y países de Centroamérica, según las autoridades del archipiélago.

En el mundo se estima que cada año más de 12 millones de toneladas de plástico terminan en los océanos y la contaminación por este material afecta al 80 por ciento de seres vivos del planeta, según estudios de varias organizaciones internacionales.