Un alto cargo las fuerzas kurdas de Siria se encuentra en Damasco para negociar con los representantes del Gobierno sirio. El oficial está al mando de una delegación que incluye a las Fuerzas Democráticas Sirias, respaldadas por Estados Unidos, en la primera visita a la capital desde el comienzo de la guerra civil.

Las autoridades kurdas, que controlan cerca de una cuarta parte de de Siria, están intentando llegar a un acuerdo político con el Gobierno de Bashar al Asad que preserve su autonomía. Las negociaciones empezaron con la hipótesis de una vuelta de empleados estatales a una de las más importante infraestructuras sirias, la presa de Tabqa. El dique, que es el más grande del país, estaba bajo el control del Estado Islámico hasta cuando, el año pasado, las Fuerzas Democráticas lo retomaron con la ayuda de la fuerza aerea estadounidense.

Servicios, política y seguridad

Las reuniones se centrarán sobre la prestación de servicios en el área controlada por los kurdos, pero no hay una agenda oficial. También se podría discutir del aparato político y de asuntos de seguridad, añadió Darar.

El resultado de la cumbre aún no está claro. Tampoco se conoce la identidad de los representantes del Gobierno que participan o el periodo de tiempo previsto en el que la delegación permanecerá en Damasco. La mayor parte de los grupos kurdosirios han evitado el enfrentamiento directo Al Asad durante los siete años de guerra civil, combatiendo a veces a su lado.

Sistemáticamente perseguidos

Los kurdos de Sirias fueron sistemáticamente perseguidos durante años por el Estado. Ahora afirman no buscar la independencia, pero esperan en un acuerdo político que proteja su autonomía. Por primera vez, en mayo, Asad dijo que iba a "abrir las puertas" a las negociaciones con las Fuerzas Democráticas Sirias, aunque al mismo tiempo amenazó con utilizar la fuerza.

Mientras, en en norte de Siria, de mayoría kurda, las milicias proturcas siguen arrestando y torturando a civiles. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha comunicado que al menos 18 civiles han sido arrestados en los últimos diez días en Afrín. Se desconoce el lugar adonde han sido trasladados los detenidos.

Afrín se encuentra bajo el dominio del Ejército turco desde el pasado marzo, cuando tomó el control en una operación militar denominada Rama de Olivo, suplantando a las milicias kurdosirias que Ankara considera terroristas por su vinculación con el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK).