El antisistema Movimiento Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga, socios en el Gobierno italiano e inmersos en una crisis política, han mostrado este jueves sus discrepancias sobre cómo gestionar el caso del barco 'Open Arms', que se encuentra con 147 migrantes en aguas italianas y sin permiso para desembarcar.

La embarcación entró en aguas territoriales italianas esta mañana y actualmente está frente a las costas de Lampedusa, a la espera de que los 147 socorridos y la tripulación puedan descender a tierra.

La Justicia italiana canceló el miércoles la prohibición contra Open Arms que había firmado el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, por la situación de gravedad en la que se encontraba el barco, que llevaba en el Mediterráneo casi dos semanas.

Pero Salvini, que mantiene un pulso firme contra la inmigración, anunció que presentaría un recurso urgente ante el Consejo de Estado y que firmaría una nueva prohibición para impedir al barco entrar en aguas territoriales de Italia.

La ha firmado durante la madrugada, pero la prohibición también necesitaba del apoyo de los ministros de Transporte, Danilo Toninelli, y de Defensa, Elisabetta Trenta, ambos del Cinco Estrellas y que se negaron a hacerlo.

"Más allá de las controversias de los últimos días, no debemos olvidar que hay niños y jóvenes que han sufrido violencia y abuso de cualquier tipo. La política nunca puede perder la humanidad. Por eso no he firmado", ha dicho hoy la ministra Trenta.

En la misma línea se ha mostrado el ministro Toninelli, quien ha sostenido que firmar otra prohibición, después de que la justicia italiana rechazara la primera, "habría puesto en dificultad al Gobierno" y "Salvini solo busca un consenso fácil".

El ministro del Interior italiano ha respondido en las redes sociales que humanidad "no es ayudar a traficantes y oenegé", sino "invertir seriamente en África y no abrir los puertos italianos".

La pasada semana, el líder de la Liga dio por rota la coalición de Gobierno con el Cinco Estrellas y presentó una moción de censura contra el primer ministro, Giuseppe Conte, que aún no tiene fecha de votación.

La crisis política está causando en los últimos días que ambas formaciones crucen acusaciones en asuntos como inmigración, seguridad o asuntos sociales.

Salvini dio un golpe sobre la mesa, confiando en que en el país se celebraran elecciones anticipadas en otoño. Sin embargo una alianza entre el Cinco Estrellas y el Partido Demócrata (PD, centroizquierda), que juntos tienen mayoría parlamentaria, podría echar por tierra sus ansias de comicios.