El año 2017 ha empezado sin tregua, con una masacre terrorista en Estambul. Un hombre armado irrumpió en la noche de Fin de Año en una exclusiva discoteca de Estambul y abrió fuego indiscriminado contra la multitud que celebraba el año nuevo, causando al menos 39 muertos y 69 heridos, según el Ministerio del Interior de Turquía. El autor del ataque sigue huido y una caza la hombre se ha desatado para dar con su paradero. La autoría del atentado no está clara, según las autoridades.

Al menos 16 de las 21 víctimas mortales identificadas hasta el momento son de origen extranjero. Entre ellas hay ciudadanos de Arabia Saudí, Marruecos, Líbano, Libia, Israel y Bélguca. Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores de España han asegurado que por el momento no le constan víctimas españolas.

El ataque, que ha causado conmoción en todo el mundo, tuvo lugar en la discoteca Reina, un conocido local de ocio enEstambul, a orillas del Bósforo. El terrorista irrumpió en el local hacia la 1.30 de la madrugada. Disparó con un arma automática y logró huir. Según la investigación, el atacante disimuló su arma bajo un abrigo y luego se cambió de ropa para huir. Según imágenes en el lugar de los hechos, iba vestido normal aunque usó un gorro de Papá Noel.

"Las operaciones para encontrar al terrrorista siguen. Esperamos que sea pronto capturado", declaró el ministro turco del Interior, Suleyman Soylu. Según distintas fuentes, en el interior de la discoteca había entre 500 y 600 personas. Algunos testigos relataron como algunas de ellas saltaron al Bósforo para huir. La guardia costera realizó una operación para rescatarlos.

CELEBRIDADES Y FUTBOLISTAS

Según explicó el gobernador de Estambul, Vasip Sahin, el atacante mató primero a un policía y un civil para entrar en la discoteca Reina, un conocido lugar de ocio de la clase alta de Estambul, frecuentado por celebridades, futbolistas y empresarios.

Hasta el momento, ningún grupo se ha atribuido este atentado, aunque los medios turcos afirman que la policía centra sus investigaciones en la rama local del Estado Islámico (EI). El país se ha visto golpeado por una cadena de ataques en los últimos meses. Unas 300 personas han muerto en el 2016 en atentados cometidos por el EI o por el grupo armado kurdo Halcones de la Libertad del Kurdistán, una escisión del PKK.

El primer ministro, Binali Yildirim, ha afirmado que todavía no está clara la autoría del atentado, aunque algunos elementos "comienzan a emerger". Hasta 25.000 policías estaban desplegados en Estambul en la noche de Fin de Año para evitar un atentado como el que finalmente ocurrió.