La policía investiga los movimientos del autor de la matanza de Nueva Zelanda, el australiano Brenton Tarrant, que pasó una noche en Jerez de la Frontera, en concreto en el mes de febrero del año pasado, según informó ayer Radio Jerez. Tarrant, de 28 años, el terrorista que acabó con la vida de 50 personas y dejó heridas a otras 50 al tirotear a discreción dos mezquitas el pasado viernes en la ciudad neozelandesa de Christchurch, pernoctó en un hotel de la ciudad gaditana. La conducta de Tarrant fue la de un «hombre normal, reservado, sí, pero como muchos que llegan solos al hotel», explicó ayer a la emisora personal del establecimiento.

En todo caso, las fuerzas de seguridad españolas están indagando qué movimientos hizo el supremacista australiano, si estuvo en alguna otra ciudad o pueblo de España y si durante su estancia se vio con alguna persona. La pista de Tarrant también se rastrea en otros países en los que estuvo en los últimos años, como Grecia, Croacia, Bulgaria y Turquía. En una de las fotos aparecidas ayer se le ve en el aeropuerto de Estambul, donde viajó en marzo del 2016.

Los medios neozelandeses dieron algunos detalles de las víctimas mortales de la masacre. Mucad Ibrahim, un niño de 3 años, y Abdullahi Dirie, de 4, son las víctimas más jóvenes. Entre los fallecidos hay residentes, refugiados e inmigrantes de origen, en su mayoría, turco, sirio, somalí, indio, bangladesí, malasio y afgano.

También trascendió ayer que parte del arsenal de armas que utilizó en el ataque** lo compró por internet. El día del ataque se supo que había escrito en ellas los nombres de autores de actos terroristas ligados a la ultraderecha. Entre los nombres, aparece el del exmilitar y ultraderechista español Josué Estebánez. El terrorista de extrema derecha compró on line cuatro de las armas que utilizó en el ataque, según confirmó ayer el propietario del negocio Gun City, David Tipple. En rueda de prensa, Tipple afirmó que vendió cuatro armas de categoría A y munición en tres o cuatro operaciones separadas verificadas por la policía entre noviembre del 2017 y marzo del 2018. La primera compra tuvo lugar el mismo mes en el que el australiano obtuvo el permiso de armas de las autoridades de Nueva Zelanda, adonde se trasladó para entrenarse para el ataque.

Mientras tanto, Tarrant rechazó a su abogado de oficio y planea defenderse solo. El letrado Richard Peters dijo al diario New Zeland Herald que el asaltante estaba lúcido, no mostró ningún tipo de arrepentimiento y que no le pareció que fuera mentalmente inestable.

Tarrant permanecerá en prisión provisional hasta el 5 de abril, cuando se espera que comparezca ante el tribunal donde, según el abogado, buscará utilizar el proceso como altavoz de su ideología. «Sospecho que no evitará la publicidad y que esta será la manera como afrontará el juicio. El trabajo del juez será dirimir con esto», dijo.