Los incendios que arrasan el extremo septentrional de la Isla Sur de Nueva Zelanda se agravaron y las llamas se acercan a la ciudad costera de Nelson, por lo que se están desalojando centenares de viviendas.

Las autoridades neozelandesas evacuaron la localidad de Wakefield, a 25 kilómetros al suroeste de la ciudad de Nelson, por temor a que los vientos empujen las llamas hacia las viviendas. Estas evacuaciones afectarán a unos 1.200 residentes, de acuerdo a la Defensa Civil de Nelson Tasman.

ESFUERZOS PARA CONTROLAR LAS LLAMAS

Los bomberos luchan contrarreloj contra esos incendios que se iniciaron el martes pasado y actualmente tienen un perímetro de 23 kilómetros, mientras intentan controlar uno nuevo que comenzó en las colinas boscosas de Walters Bluff, al noreste de Nelson y muy cerca del centro de la ciudad.

En las redes sociales se pueden ver imágenes de las columnas de humo que se levantan sobre Nelson, muy pegado a decenas de viviendas, así como a los bomberos y helicópteros en plena lucha contra enormes lenguas de fuego. Los incendios que comenzaron aparentemente provocados por una máquina agrícola, aumentaron de 1.600 a 2.000 hectáreas y hasta ahora han calcinado al menos una vivienda en Nelson.