Antes de realizar el ataque contra la base aérea de Homs, el Pentágono avisó a sus homólogos rusos para evitar que su personal en la base atacada fuera alcanzado. Esa comunicación se hizo a través de la'deconfliction line' (teléfono para evitar conflictos), uno de los canales que tienen EEUU y Rusia para poder comunicarse de forma directa en situaciones de emergencia.

La 'deconfliction line' es la heredera del famoso teléfono rojo, que se estableció en 1963 para que los líderes de la URSS y de EEUU pudieran hablar directamente.

Este nuevo sistema funciona desde la base estadounidense de Al Udeid, en Qatar. Se suele emplear para que Rusia y EEUU se informen mútuamente de los vuelos de sus pilotos sobre Siria, para evitar potenciales incidentes armados.