Amnistía Internacional (AI) ha acusado a los Emiratos Arabos Unidos (EAU) y a sus fuerzas yemenís aliadas de torturar a los detenidos en una red de prisiones secretas en el sur de Yemen. Estas violaciones deberían ser investigadas como crímenes de guerra, ha dicho la oenegé. AI ha denunciado también la desaparición de muchas personas, que habían sido detenidas arbitrariamente por las fuerzas de seguridad de EAU y de Yemen.

El Gobierno de EAU, un aliado fundamental para Estados Unidos, ha asegurado que nunca ha tenido cárceles o centros de detenciones secretos y que los prisioneros han estado bajo el control del Gobierno yemení.

"Hemos presionado al Yemen para que lleve a cabo una investigación independiente sobre el asunto. Nosotros seguimos al lado de nuestro aliado", han declarado las autoridades de EAU en un informe como respuesta a AI.

Control total

EAU es uno de los países que lidera la alianza de Estados árabes que combaten en Yemen en apoyo al Gobierno, basado en el sur del país, frente a los rebeldes hutis, respaldados por Irán, que tienen bajo su control la capital Saná y las regiones del norte.

Una delegación de EAI en Ginebra afirmó el mes pasado que las autoridades yemenís "tienen el control total de los sistemas de gobierno, judiciales y penitenciarios locales y federales".

Sin embargo, el Ministro del Interior, Ahmed al-Maysari, desde el Gobierno trasladado al sur del país, pareció contradecir la posición oficial emiratí al pedir a EAU que cerrara o entregara las prisiones que administra. El pasado martes, Maysari confirmó que había llegado a un acuerdo con los aliados y que ahora todas la prisiones en las áreas controladas por el Gobierno están bajo su autoridad.

Uso generalizado de torturas

El informe de AI se basa en una investigación llevaba a cabo entre marzo del 2017 y mayo del 2018 en las provincias de Aden, Lahj, Abyan, Shabwa y Hadramout, localizadas al sur del país. También se documentaron malos tratos, incluidas las palizas, el uso de descargas eléctricas y la violencia sexual. "EAU, que opera en la sombra en en sur de Yemen, parece haber creado una estructura de seguridad paralela al margen de la ley, donde violaciones atroces siguen sin control", ha advertido Tirana Hassan, directora de Respuesta de Crisis en AI. "Estas violaciones, que tienen lugar en el contexto de la guerra civil de Yemen deberían ser investigadas como crímenes de guerra".

El informe de Amnistía Internacional también exhorta a EEUU a investigar las informaciones sobre casos de tortura que llegan desde EAU.