Los últimos años del Sol de México -así se conoce al cantante en su país- habían sido un desfile de pequeños resbalones, rumores sobre su estado de salud y declaraciones poco amables a cargo de examores y exaliados. Uno de aquellos resbalones se hizo viral en el 2015: la famosa caída del rey del bolero durante una actuación en la ciudad de Palenque, al sur de México.

A finales de ese mismo año, empezaron las cancelaciones de conciertos: dejó uno después de tres temas, afirmando que no aguantaba el aire acondicionado; un mes después, canceló la gira que lo iba a llevar por Estados Unidos, y en marzo del año siguiente, todos los programados en el Auditorio Nacional de México.

Mientras la rumorología se disparaba, sus portavoces aludían a sus problemas de tinnitus, patología auditiva que conlleva molestos pitidos en los oídos. Ya en noviembre del 2015, Luis Miguel explicaba en el diario argentino Clarín: «Es una situación complicada. Tienen que pensar que yo empecé con nueve años esta carrera: con la música, los decibelios, los conciertos. Son más de 30 años expuesto a sonidos muy fuertes».

En verano del 2016, antiguos amores y colaboradores se ponen de acuerdo en restarle méritos como persona. Su exmujer Aracely Arámbula lo acusa de mal padre en el diario colombiano El Tiempo: «Él es un padre ausente. Ojalá que si algún día quiere recuperar el tiempo perdido, no sea demasiado tarde». Y en Vanity Fair de México, su antiguo productor Arturo Velasco aseguraba que «mató a todos sus amigos en la vida», y añadía: «Ha acabado con su gente más cercana, algo andaba mal en su vida y ya le llegarán las facturas».

Ante este paisaje, Luis Miguel se vio obligado, tras mucho silencio, a hablar. A través de un teaser, para ser concretos. El de Luis Miguel. La serie, en el que afirmaba: «Durante décadas muchas personas han hablado de mi vida, pero ha llegado el momento de que mi verdad salga a la luz».

Estrenada por Netflix el pasado día 22 (no se podrán ver todos los episodios de una vez, sino uno por semana), Luis Miguel. La serie es la lujosa forma que ha elegido Luis Miguel de contar su versión de los acontecimientos.

Esta primera y única historia oficial sobre el cantante, como se describe en nota de prensa, es un biopic de factura impecable, interpretado con ferocidad por Diego Boneta (en el papel del cantante) y, sobre todo, Óscar Jaenada (como el padre del artista, también su mánager durante largo tiempo).

Es fácil preguntarse si una historia de Luis Miguel supervisada por Luis Miguel hará honor a la verdad: a menudo, las historias no autorizadas son más fieles a los hechos que las oficiales. Pero, al menos en lo concerniente a la relación con su padre, el artista no parece haberse pasado con el endulzante. La serie explica cómo Luisito Rey empezó a obsesionarse con convertir a su hijo en la estrella que él no llegó a ser, y trató de tomar pleno control no solo de su carrera, sino también de su vida, de sus parejas.

«Para llegar a la cima uno tiene que hacer muchos sacrificios», dice el Luis Miguel ficcional en el tráiler de la serie. «Cuando llegas, te das cuenta que es un lugar solitario». En el primer episodio, vemos cómo Luisito quitó protagonismo a la novia de su hijo, Mariana (encarnada por Paulina Dávila), en el clásico de los videoclips ochenteros Cuando calienta el sol, quizá por creer que un noviazgo serio y evidente no ayudaba al negocio. Ese videoclip es la base de la trama del piloto de Luis Miguel. La serie, una producción que promete ser más glamurosa que El asesinato de Gianni Versace y ofrecer el triple de giros. ¿Placer culpable de la temporada? Placer a secas.

Según sugiere ya el tráiler, en la recta final de temporada se tocará la misteriosa desaparición de Marcela, madre de Luis Miguel, vista por última vez en 1986. Existen varias teorías principales sobre su paradero: una dice que está internada en un psiquiátrico y no reconoce a su hijo; otra, que habría empezado una nueva vida en Gran Canaria; y una tercera, que habría fallecido (según Telemundo, quizá durante un tiroteo).

La obsesión por esta desaparición sigue viva y quizá mueva a muchos a ver la serie, aunque probablemente la verdad sobre el paradero de Marcela no salga a la luz; si es que se conoce.