Todas las alarmas de seguridad han saltado en el palacio de Kensington después de que se haya conocido que un expresidiario haya estado cerca de los hijos de los duques de Cambridge. La prensa británica se hace eco de una investigación de 'The Sun' que asegura que un torturador convicto llamado Darren Benjamin que ahora se dedica al reparto de muebles accedió recientemente al palacio real para descargar una serie de objetos encargados por la familia mientras que Guillermo de Inglaterra, su esposa Catalina y sus tres hijos -Jorge (7), Carlota (4) y Jorge (1)- se encontraban dentro.

Benjamin, de 40 años, y que fue condenado en el 2008 a siete años de cárcel después de haber torturado a un tal Anthony Powell apuñalándolo y tirándole agua hirviendo, entró el pasado 14 de julio en las dependencias privadas de los duques y, tal como publica el tabloide, estuvo incluso muy cerca de los pequeños, que estaban en el patio a cargo de la niñera, María Teresa Borrallo.

Ante tal agujero de seguridad, los duques de Cambridge han expresado su "preocupación" y han abierto una investigación para esclarecer los hechos.

ALARDEA ANTE LOS COLEGAS

'The Sun' asegura que el torturador convicto ha llegado incluso a jactarse ante sus amigos de haber estado muy cerca de los pequeños príncipes. Según una fuente citada por el diario, "sus compañeros se sorprendieron de que Darren pudiera entrar en palacio y estar tan cerca de la realeza dado su pasado".

Un "miembro importante" de la realeza que cita el rotativo asegura que Guillermo "cree firmemente que los delincuentes merecen una segunda oportunidad una vez han cumplido su condena, pero le preocupa que los protocolos de seguridad actuales no sean lo suficientemente fuertes". "Es muy importante que sepamos quién entra en palacio", remacha.

El mismo artículo también afirma que el personal también está "conmocionado" por la falta de verificaciones detalladas de los antecedentes que se siguen.

Tras este grave fallo de seguridad, el palacio de Buckingham ha tomado cartas en el asunto y ha abierto una investigación al más alto nivel. Un asistente real explicó el pasado domingo que se ha llevado a cabo una "revisión de seguridad urgente para verificar que los procedimientos actuales son los apropiados" y que, mientras tanto, "se ejecutará se evaluará más exhaustivamente a todos aquellos que accedan a palacio".

SEGUNDO SUSTO EN UN MES

Este incidente es el segundo susto de seguridad para la familia real en pocos días. A principios de mes un hombre de 22 años escaló la berja de Buckingham a las dos de la madrugada mientras la reina Isabel dormía a pocos metros de distancia, llegando a abrir varias puertas antes de ser reducido por el personal de seguridad. Scotland Yard aseguró el hombre no llevaba armas y que el incidente no se consideraba terrorista, pero el caso recuerda al de Michael Fagan, que hace casi cuatro décadas logró colarse en la habitación de la reina de Inglaterra e incluso charlar con ella durante 10 minutos.