En la carrera cinematográfica de Keira Knightley predominan los filmes de época como Orgullo y prejuicio (2005), Expiación (2007) y Anna Karenina (2012). Un cine histórico, ya sea victoriano, medieval o barroco, por el que la actriz siente cierta predilección. De hecho, hace unos meses declaró que apenas trabaja en películas ambientadas en la época actual porque «casi siempre violan a los personajes femeninos». Un argumento un tanto desmesurado que podría lastrar su carrera, pero a sus 33 años a la intérprete británica no le faltan ofertas: buena prueba de ello es su nuevo trabajo, Colette, donde se pone en la piel de la reconocida escritora francesa.

La cinta, cuyo tráiler ya se puede ver desde esta semana, relata la azarosa vida de Sidonie-Gabrielle Cole-tte, más conocida solo como Colette, la autora que rompió los cánones sociales, profesionales y estéticos de principios del siglo XX. Lucía el pelo corto a lo garçon y vestía sobria con pantalones, pero la valentía que demostraba a la hora de vestir le faltaba ante su marido. Mujer con un infinito talento, fue martirizada por su esposo, que firmaba con su nombre las novelas que ella escribía. El actor Dominic West encarna a su marido en un reparto en el que también figuran Fiona Shaw, Denise Gough, Robert Pugh, Eleanor Tomlinson y Aiysha Hart.

FENÓMENO LITERARIO / Nacida en 1873 en Saint-Sauveur-en-Puisaye, en su juventud conoció al escritor Henry Gauthier-Villars, más conocido como Willy, 15 años mayor. Se casaron cuando ella cumplió los 20 años, pero cuando Colette saltó a la fama como novelista, su marido aprovechó la perspicacia de su esposa para continuar cosechando éxitos a su costa. Así, la autora escribió la serie de novelas de Claudine (Claudine en la escuela, Claudine en París, Claudine casada, Claudine se va y El refugio de Claudine) basándose en sus recuerdos de infancia y adolescencia, pero Willy las publicó con su nombre y fueron todo un fenómeno literario.

Tras unos tortuosos años a la sombra de su esposo y harta de sus infidelidades, la escritora logró salir del infierno marital. Siguió escribiendo, esta vez con su nombre, pero para sobrevivir trabajó como bailarina de cabaret, actriz de teatro y mimo. Con los años se convirtió en una consagrada novelista, guionista y periodista.

Una vez divorciada también empezó a coleccionar amantes, tanto hombres como mujeres. Y se casó un par de veces más. Así, en 1912, contrajo matrimonio con el periodista Henry de Jouvenel, redactor jefe de Le Matin, e inició su carrera de reportera. La pareja tuvo una hija, pero tras varias crisis el matrimonio se rompió definitivamente cuando Colette se lio con un hijo de Jouvenel, Bertrand, que apenas tenía 17 años. Solo logró cierta estabilidad con su tercer marido, Maurice Goudeket, también escritor y periodista, con quien se casó en 1935. Este judío al que Colette salvó de los nazis estuvo junto a ella en su lecho de muerte, en París, en 1954.

NUEVE PREMIOS OSCAR / Colette solía volcar anécdotas autobiográficas en sus novelas, muchas de las cuales han sido adaptadas al cine con éxito: Gigi, que en 1957 se convirtió en un musical dirigido Vincente Minnelli con Leslie Caron y Louis Jourdan, recibió nueve premios Oscar.

Sin duda, su historia es apasionante y ahora llega a la gran pantalla de la mano de Knightley. Un biopic con tintes feministas que se presentó en enero en el festival de Sundance y su estreno está previsto para el próximo septiembre, aunque, de momento, se desconoce cuándo llegará a España.