A solo cuatro días del enlace real entre el príncipe Enrique y la actriz norteamericana Meghan Markle la noticia el padre de la novia, Thomas Markle, acaba de anunciar en el portal TMZ que no acudirá al enlace del próximo sábado en el castillo de Windsor ni acompañará a su hija al altar como manda la tradición. La razón no es su estado de salud, pues hace una semana sufrió un ataque al corazón. De ese susto ya ha sido dado de alta por los médicos. Al parecer, el motivo del plantón es la polémica generada tras saberse que habría pactado unas fotos con un paparazzi.

Según ha revelado él mismo a TMZ, Markle está totalmente "arrepentido" de haber amañado el montaje, por el que algunos medios como The Independent aseguran que podría haber cobrado 100.000 libras esterlinas (unos 113.600 euros, al cambio), y ha decidido ausentarse del enlace real para no causar más daño ni a su hija, futura duquesa de Sussex, ni a la familia real británcia.

Las fotos que pactó con el paparazzi le mostraban tomándose medidas para hacerse un traje a medida para la boda y en otras buscando en internet fotos de su hija con el nieto de la reina Isabel II, en un locutorio de Rosario (México), donde vive actualmente.

Thomas Markle, en una cafería de México, el pasado abril. / TWITTER

CHANTAJE CON OTRAS FOTOS

La razón detrás del montaje, según el propio progenitor, no sería la tajada que sacaría a cambio. Al parecer todo respondería a un chantanje que vendría de lejos, cuando el año pasado fue cazado por un paparazzi en "circunstancias desfavorables" (...) "comprando cerveza, solo y desaliñado". A su juicio, las fotos le hacían parecer lo que no era, ya que ni siquiera bebe cerveza, ha confesado en su descargo. Asegura Markle que aquellas botellas las compró para llevárselas a los guardas del lugar donde reside.

En la misma entrevista asegura que desde que su hija comenzó a salir con el príncipe Enrique le han ofrecido cantidades desorbitadas de dinero por conceder entrevistas -hasta 120.000 euros-, y que él siempre ha rechazado hablar.

RECONSTRUIR SU DAÑADA IMAGEN

Si pactó con el fotógrafo hacerse ese reportaje probándose el traje para la boda y buscando fotos de su hija y su futuro yerno fue porque pensó que así podría reconstruir su dañada imagen, cuenta en TMZ. Sin embargo, ahora se arrepiente "profundamente".

Un día después de conocerse la existencia del montaje en el cibercafé, la propia hermana de la novia por parte de padre, Samantha Markle, también salió al ruedo y reconoció haber sido ella misma quien se encargó de organizar el montaje de su padre con la agencia de fotos.

COMUNICADO DE PALACIO

Aunque hace unos días el Palacio de Kensington detalló que estaba previsto que el próximo sábado Thomas Markle esperara a su hija en la puerta de la capilla de St. George, adonde la novia llegaría en un coche acompañada por su madre, ahora acaba de hacer público el siguiente escueto comunicado: "Este es un momento muy personal para Meghan Markle unos días antes de su boda. La novia y el príncipe Enrique piden de nuevo que la comprensión y respeto por ellos se aplique tambiéhn a Thomas Markle en esta situación complicada".

La polémica del padre de Meghan se suma a la que a principios de este mes protagonizó el hermano de la actriz, Thomas Markle Jr. que le pedía por carta a Enrique que suspediera la boda. "Acaba con este falso cuento de hadas", le aconsejaba. "Aún no es demasiado tarde. Es obvio que Meghan Markle no es la mujer para ti", le decía al hijo menor de Carlos de Inglaterra y Lady Di.

El hermano, que no fue invitado al enlace, decía en la revista Intouch que su hermana "estaba representando un papel", que "es una oportunista". "Un poco de fama la ha vuelto loca. La ha convertido en una mujer superficial, engreída, vanidosa... que se olvida de sus orígenes y de su familia", remachaba.