La mujer que ha hecho que las curvas vuelvan a ponerse de moda, Kim Kardashian, se ha propuesto también convertir a su hija de 5 años en todo un icono de moda infantil. De hecho, North West, que así se llama la hija de la estrella de la televisión estadounidense y del rapero Kanye West, ya era una habitual en las primeras filas de las pasarelas cuando apenas gateaba. La pequeña influencer tuvo estilista desde el mismo momento en que llegó al mundo. Su inmenso vestidor haría las delicias de cualquier fashion victim en versión mini, con cientos de vestidos diseñados por firmas de lujo, desde abrigos de leopardo de Roberto Cavalli a diseños de Óscar de la Renta, Dolce & Gabbana y Versace. Sus apariciones despiertan admiración y rechazo a la par. Recientemente ha sido muy criticado su estilismo capilar en el que llevaba su melena rizada original planchada en una coleta.

Con semejantes precedentes -y mirando de reojo a la hija de Beyoncé, Blue Ivy Carter, otra auténtica minidiva de 6 años-, North West ha protagonizado su primera campaña publicitaria. La firma de su debut ha sido la italiana Fendi, y el motivo ha sido el décimo aniversario del emblemático bolso Peekaboo. En una imagen, la pequeña aparece en primer plano junto a su madre, Kim Kardashian, y su abuela, Kris Jenner, en Instagram la han titulado Tres generaciones y la estampa de las tres juntas, sentadas en el campo y cada una con su bolso, superó los dos millones de me gusta en unas horas. Por si fuera poco, este verano la cría ha acudido a un campamento de moda para aprender a familiarizarse con los patrones, el corte y la confección... El cursillo acabó con un desfile de moda. Y en primera fila estaban sus orgullosos padres.